El dirigente loa a la religiosa anglicana que «rechistó» al presidente de EEUU y pide que la Iglesia Católica también ordene obispas
El vicesecretario institucional del PP y eurodiputado valenciano, Esteban González Pons, ha denominado «ogro naranja» al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, del que también afirma que «se ha proclamado macho alfa de una manada de gorilas».
«Será un emperador, pero no el fundador del imperio». «Su poder se fundamenta en el caos circundante, en la ley del más fuerte que todavía mantiene en equilibrio al planeta. Se ha proclamado macho alfa de una manada de gorilas y nadie rechista. ¿Nadie? Perdón, alguien sí», afirma el político en un artículo de opinión publicado en el periódico Las Provincias con el título ‘Una obispa así quiero yo’.
En el artículo, González Pons alaba la actitud de la obispa anglicana Marian Budde al «decirle la verdad a la cara» al presidente de Estados Unidos y considera que la Iglesia Católica también debería ordenar a mujeres en ese cargo.
«Mientras los presidentes europeos, Sánchez incluido, se apresuraban a darle la bienvenida en Twitter, Marian Budde, una obispa de comunión anglicana de 65 años, menuda y enjuta como un Harry Potter episcopaliano, igual que en aquella imagen del estudiante chino plantado frente a cuatro tanques en la plaza de Tiananmén, le decía la verdad a la cara ante todo Washington en el oficio religioso de la coronación», alaba.
Y agrega: «Mirando al ogro naranja, pidió a Dios por los jóvenes homosexuales, por los sin papeles que lavan nuestros platos en los restaurantes, por los niños cuyos padres pueden ser deportados, por los refugiados que huyen de la guerra y la persecución… Dios nos enseña que debemos ser misericordiosos con los extraños porque todos nosotros fuimos alguna vez extraños en esta tierra, le espetó para terminar al reelegido presidente, nieto de inmigrantes ilegales».
«Tantos grandes pesos y contrapesos de la democracia americana y el único que funciona es la voz de una religiosa», reflexiona el europarlamentario, que apunta que su homilía fue «la nota discordante en el entierro de los valores democráticos al que asistimos en medio de un vergonzoso silencio general».
Según González Pons, «la historia se está desestabilizando y lo que faltaba era un desestabilizador jugando a la ruleta rusa con sus misiles nucleares». «Que los Estados Unidos son nuestro mejor aliado, es cierto, pero así no. Sólo hay que decirlo, como la obispa Budde, o se nos hará tarde». «Y déjenme añadir que mujeres como ella, ordenadas en la Iglesia Católica, también le hacen falta al mundo», concluye.
«RADICAL DE IZQUIERDAS»
Estas palabras han provocado las críticas de diversos dirigentes de Vox, como la presidenta de Les Corts Valencianes, Llanos Massó, quien considera que «estas declaraciones de González Pons, del PP, podrían ponerse en boca de Pedro Sánchez o de cualquier radical de izquierdas».
«Tiene la chulería suficiente para insultar al presidente de la mayor potencia mundial, que ha arrasado en las urnas y la prepotencia para pedirle a la iglesia católica que cambie su magisterio. Y algunos siguen insistiendo en que nos tenemos que entender con este PP», afea Massó en un mensaje en redes sociales.
Igualmente crítico se muestra el ‘síndic’ de Vox en el parlamento autonómico, José María Llanos, quien dice en un mensaje en X: «A González Pons le conocemos demasiados años. Firme defensor de la ‘doctrina woke’ ya en 2008 de Educación para la Ciudadanía. Y le recuerdo metiendo por medio de sus incoherencias a la Verge dels Desamparats. Creo que es hora de que se retire o de que se quite la careta y se vaya con Sánchez».