La Inspección Técnica Vehicular (ITV) es un trámite obligatorio en España en la que los coches son examinados sobre sus condiciones técnicas para circular. La ITV es un trámite necesario en el que se dictamina si el vehículo está apto para salir a la calle y es uno de los certificados que te solicitan sin falta en los controles policiales. Para ello, es necesario tener un mantenimiento asiduo del coche, hacerle las revisiones necesarias para poder usarlo y asegurar que esta inspección será aprobada en el momento.
Pero como toda prueba, la ITV también tiene una serie de trucos que los expertos confían en difundir para poder pasarla sin problemas. Son estrategias legales, que permitirán atravesar este test sin ningún tipo de problema y que garantizarán su efectividad sin necesidad de volver a realizar esta inspección más adelante. Se trata de cuatro consejos profesionales que serán de gran ayuda para que el test salga tal y como se esperaba.
2Chequeo general antes de la ITV
Aunque parezca obvio realizar una revisación ocular del coche antes de realizar la ITV es una tarea crucial para poder pasar la prueba. Los expertos recomiendan chequear el estado de los espejos, luces, matrícula, limpiaparabrisas o neumáticos y más detalles para que el paso por la inspección sea lo más exitoso posible. También es necesario revisar las lunas (parabrisas) para poder asegurar un paso auspicioso por la ITV.
Por este motivo, los expertos aseguran que evitar cualquier tipo de daño que quede expuestos ante los ojos de los examinadores es crucial para poder atravesar la Inspección sin problemas. Chequear si existen daños de cristal, fisuras u otros impactos menores, ayudarán a que este trámite sea lo más simple posible y garantiza no perder tiempo. En este punto es necesario tomar en cuenta que existen algunos casos donde el vehículo debe atravesar una Inspección Técnica añadida que se da en los casos de accidente o modificaciones significativas.
