En el imaginario colectivo, Madrid siempre ha sido considerado el corazón de España. Su ubicación estratégica, su papel como capital y su relevancia histórica han consolidado esta percepción. Sin embargo, la realidad geográfica cuenta una historia diferente. El verdadero epicentro de España no se encuentra en la bulliciosa capital, sino en un pequeño municipio de la provincia de Toledo: Nombela. Este tranquilo pueblo, desconocido para muchos, guarda el honor de ser el punto exacto que equilibra el mapa de nuestro país.
La idea de que Madrid es el centro de España no es del todo errónea, pero tampoco es precisa. Si bien la capital está cerca del epicentro, el cálculo exacto sitúa este punto en un lugar mucho más discreto. Nombela, con su encanto rural y su rica historia, se convierte así en el verdadero epicentro geográfico de España, un dato que sorprende y despierta la curiosidad de quienes buscan conocer más sobre la geografía y la historia de nuestro país.
2NOMBELA: UN PUEBLO CON HISTORIA Y ENCANTO RURAL
Nombela no es solo el epicentro geográfico de España; también es un lugar con una rica historia y un encanto rural que merece ser descubierto. Situado en la comarca de Torrijos, este municipio toledano combina la tranquilidad de la vida rural con un legado histórico que se remonta a siglos atrás. Sus calles, sus paisajes y su gente reflejan la esencia de la España más auténtica.
El pueblo cuenta con varios puntos de interés que atraen a los visitantes. Entre ellos, destaca la iglesia parroquial de San Esteban Protomártir, un edificio de origen medieval que ha sido testigo del paso del tiempo. Además, sus alrededores ofrecen paisajes naturales ideales para quienes buscan desconectar del ritmo frenético de las ciudades. Los campos de cultivo, los caminos rurales y la cercanía al río Alberche convierten a Nombela en un destino perfecto para los amantes de la naturaleza.
A pesar de su tamaño, Nombela ha sabido conservar su identidad y su tradición. Sus fiestas patronales, su gastronomía y la hospitalidad de sus habitantes son un reflejo de la riqueza cultural de este rincón de España. Ser el epicentro geográfico del país es solo una de las muchas razones por las que este pueblo merece ser conocido.