El duro interrogatorio del Juez a Mouliaá: «¿Siguió teniendo contacto con su presunto violador?»

El jueves 16 de enero Elisa Mouliaá declaró ante juez Alfonso Carretero, titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid para ratificar su denuncia por agresión sexual contra el exlíder de Más País Iñigo Errejón que declaró el mismo día con hora y media de diferencia.

En el vídeo de la declaración a la que ha tenido acceso MONCLOA llama la atención el tono del magistrado durante el interrogatorio a la actriz que asistió con su letrado Alfredo Arrién. En varias ocasiones la formula preguntas en las que indaga en las posibles contradicciones de la denunciante. A lo largo de los 80 minutos de la declaración el nerviosismo de Mouliaá y titubeos a la hora de responder a algunas de las cuestiones se hacen evidentes.

“¿Qué canción sonaba cuando estaba bailando con su amigo Fernando?”, le pregunta en el momento en el que ella relata como estando con el citado Fernando, Errejón, según su testimonio tuvo un “ataque de celos” y decidió, siempre según su testimonio, llevársela a la habitación donde se produjo la parte más grave de la presunta agresión sexual.

LAS PREGUNTAS DEL JUEZ A MOULIAÁ

“¿Usted no le dice que parase?”, le pregunta sobre el momento en el que supuestamente él la inmoviliza sobre la cama. En su declaración Mouliaá explicó que cuando el entonces portavoz de Más País se la llevó a una habitación. En su denuncia ante la Policía Nacional, la actriz aseguró que Errejón cerró con un pestillo, se sacó su miembro viril y empezó a tocarle sus pechos. Sin embargo, ante el Juez Carretero aseguró que no había pestillo, sino que este detalle fue incorporado por la Policía en el atestado. “Dice que ahí este señor se sacó el miembro viril ¿para qué se sacó el miembro viril, usted sabe para qué?”, quiso saber el titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid.

También quiso saber el magistrado si tras la noche de autos la denunciante había seguido teniendo contacto con el denunciado. Ella confesó que sí. Que se habían escrito. “¿Mantuvo usted contacto con su presunto violador?”, quiso saber el magistrado.

La defensa de Errejón ha preguntado a Mouliáa por una denuncia que ésta interpuso contra su exmarido por sexo no consentido y que se habría terminado archivando. El juez ha permitido que la actriz se pronunciase al respecto porque, según ha apuntado, esa información es pública. Según la defensa de Errejón, hubo conversaciones de la actriz pidiendo ayuda al político con respecto a este asunto.

Elisa Mouliaá a su llegada al juzgado.
Elisa Mouliaá a su llegada al juzgado.

Preguntada por la defensa de Errejón por la tardanza en la denuncia, Mouliaá aseguró que “si se demoró tres años fue porque su psicólogo le dijo que no lo hiciese hasta que no estuviese preparada” y que “se habría visto animada a hacerlo a raíz de denuncias anónimas de otras mujeres víctimas de agresión sexual”.

EL JUEZ CARRETERO

De tradición familiar jurídica, Carretero empezó su trayectoria en 1991 en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Valdepeñas (Ciudad Real). Dos décadas después llegó al juzgado del que es titular desde 2011.

En su trayectoria se ha encargado de instruir juicios con especial relevancia mediática. Fue su juzgado quien investigó a una religiosa, conocida como Sor María, por su vinculación a la red de bebés robados que actuó en España durante décadas. También mucha relevancia social tuvo el caso del ‘clan de las bosnias’ que cometían hurtos en el metro de Madrid.

En los últimos años se hizo cargo del caso de Dani Mateo, denunciado tras sonarse los mocos con una bandera de España en un gag de El intermedio (La Sexta) e imputó a la periodista Pilar Velasco por una serie de informaciones sobre el exvicepresidente de Madrid Ignacio González.

En los próximos meses se encargará también de otro asunto con gran trascendencia mediática y política: el caso contra Luis Media (hijo de Naty Abascal) y Alberto Luceño por las comisiones en la venta de mascarillas al Ayuntamiento de Madrid.

Carretero tiene fama en el ámbito jurídico de ser muy duro en sus interrogatorios, conocido como “el del 47” le definen como implacable a la hora de aplicar sus decisiones ajustadas a derecho.