La Moncloa abre un nuevo paradigma en el mundo empresarial con cambios de calado en Telefónica e Indra. Marc Murtra pasa de Indra a la presidencia de Telefónica, mientras que Ángel Escribano, presidente del grupo de defensa del mismo nombre, será nuevo jefe en Indra.
Los cambios se producen en un momento clave para las telecomunicaciones y defensa, así como para la conquista del espacio. Tras un consejo extraordinario celebrado este sábado y nueve meses después del plan para crear un «campeón nacional» en telecomunicaciones, espacio, defensa, ciberseguridad y control de datos, La Moncloa ha dado el paso definitivo, apenas tres días después del retraso de STC para entrar en el consejo de la operadora cotizada en el Ibex 35, para alumbrar una de las operaciones económicas más importantes en la historia de España.
La operación interna con Telefónica se lleva fraguando desde abril del pasado año, cuando el Ejecutivo puso encima de la mesa el impulso a Hispasat, Indra y una apuesta decidida por la concentración de datos para luchar contra la ciberdelincuencia. De hecho, hace apenas tres días anunció la creación del Centro Nacional de Ciberseguridad, a pesar de tener el INCIBE ya en marcha. El fin es la defensa ante los ciberataques en sistemas estratégicos, especialmente tras los sufridos por distintas administraciones públicas, como la propia Agencia Tributaria, listado de la Guardia Civil o la Seguridad Social.
Asimismo, se tratará de detener cualquier ataque hacia infraestructuras consideradas críticas, como energía, banca, transporte o la propia Bolsa, así como en Sanidad, recursos hídricos y centrales nucleares, entre otros.
El aterrizaje de la SEPI en Telefónica apenas hace diez meses, así como el impulso para fusionar Indra e Hispasat en una única sociedad para poner en marcha un sistema de satélites de telecomunicaciones y Defensa, como dejó caer Pedro Duque, presidente de Hispasat, en el encuentro anual de la APIE significó la apertura para confeccionar un nuevo «campeón nacional» en todo el ámbito de las telecomunicaciones, ciberseguridad y defensa, un reto que tendrá que concretar Marc Murtra en el esperado nuevo plan estratégico de la compañía, cuya valoración bursátil alcanza los 22.660 millones de euros a cierre de la jornada de este pasado viernes.
LA JUGADA A TRES BANDAS: INDRA, HISPASAT Y REDEIA
Murtra, hombre fuerte del PSC, es un técnico clave en Defensa y telecomunicaciones, el escogido por el consejo de Telefónica por petición de Moncloa al consejo y justo en un momento en el STC iba a entrar en el consejo. Para esta operación ha sido clave la colaboración de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), decidida a cumplir las órdenes que se han dado desde el Ejecutivo para pilotar una compañía de bandera y conocida en todo el mundo.
Con esta operación se abre la puerta a la renacionalización de la compañía y el Ejecutivo tendrá acceso a infinidad de datos de numerosos sectores estratégicos con el fin de crear un auténtico monstruo tecnológico.
No se descarta así un nuevo movimiento de calado, como la integración de Indra e Hispasat en Telefónica, que es precisamente el plan original del Ejecutivo. Para ello, era necesario tener el control de las tres compañías, como así se ha conseguido este sábado.
En este sentido, la tesorería de Telefónica es más que suficiente para absorber los 3.148 millones de euros a los que cotizada Indra. Para Hispasat había otros planes. Murtra dio una valoración de entre 600 y 650 millones de euros, prácticamente la mitad del coste que exige Redeia -Red Eléctrica-, pilotada por la exministra Beatriz Corredor, que pagó 949 millones en 2019 para hacerse con la empresa.
Murtra hizo lo imposible para rebajar el precio de compra de Hispasat, pero la empresa de Corredor se negó en rotundo, más cuando tendría que dar explicaciones a sus propios accionistas y fondos de inversión que están en el capital, como Amancio Ortega y Blackrock, mientras que la SEPI mantiene el 20% del capital.
EL PAPEL DE OUGHOURLIAN Y LA BICEFALIA EN PRISA
Antes de que Telefónica completara la compra de Indra, ésta deberá desprenderse de Minsait, una operación que está más cerca de cerrarse ante el interés suscitado en fondos norteamericanos y británicos.
Por el momento, Indra trata de desprenderse de su filial de pagos y después trocear Minsait, pero la operación está congelada desde noviembre del pasado año ante la falta de ofertas de interés y vinculante, así por la bicefalia en la compañía. Cinven llegó a presentar una oferta por la filial de Indra por un importe de entre 500 y 600 millones, pero no contentó a la compañía presidida por Murtra. Los planes de Pedro Sánchez están bendecidos, como no podía ser de otra manera por María Jesús Montero y la SEPI, mientras que La Moncloa no ve con buenos ojos la venta de Minsait, por lo que estaría en el perímetro de Indra y por tanto de Telefónica.
Para esa operación se organizó un proceso de subasta, con varios fondos interesados, como Pollen Street Capital, Constellation Software, inversores industriales y financieros. Dentro del consejo de Indra hubo presiones entre quienes pedían una venta troceada y la totalidad, como el consejero, presidente y máximo accionista de Prisa, Joseph Oughourlian. La idea del máximo ejecutivo de la editora de El País pasaba por centrar a Indra en los contratos de Defensa y depender así del BOE para rentabilizar su inversión. De hecho, su participación ha ido creciendo desde el 3,236% al 6,2% con Amber, mientras que a nivel personal ha pasado del 4,18% al 5,13%.
Oughourlian y Amber podrían recuperar su inversión y Murtra se quitaría un auténtico quebradero de cabeza si finalmente Telefónica comprase Indra al eliminar al principal gallo del gallinero. Pero el mercado tiene sus tiempos y no es una operación que se pueda realizar a la ligera aunque lleve casi diez meses cocinándose.
LA CONQUISTA DEL ESPACIO CON TELÉFONICA E INDRA
Con estos mastodontes tecnológicos, España tendría un grupo empresarial de primer nivel y con todo listo para ser un líder global. Todo por el trabajo realizado por Álvarez-Pallete y su equipo, que ha logrado con un brutal esfuerzo enderezar el rumbo de la operadora, saneando deuda y manteniendo un perfil más que activo en España, Europa y Latinoamérica.
Con todo ello, Telefónica, Indra e Hispasat estarían en condiciones de crear un gigante también del espacio, sin paragón en Europa y con la base formada para competir de tú a tú con los gigantes mundiales.
EL TRABAJO DE ÁLVAREZ-PALLETE DEJA UNA TELEFÓNICA SANEADA
El cambio en la cúpula de Telefónica se produce a solo cinco semanas de su presentación de resultados. La operadora registró un beneficio de casi 1.000 millones de euros en los nueve primeros meses del pasado ejercicio, un 21% inferior a la cifra registrada en el ejercicio 2023. Hace un mes, Álvarez-Pallete renovó a todo su comité ejecutivo, con algunos cambios, como la entrada de Andrea Folgueiras por Enrique Blanco como directora de Tecnología o el de Juan Azcue por Mark Evans al frente de Estrategia.
Es de esperar que Murtra modificará los órganos internos en Telefónica e incluso no se descarta que pesque en Indra para conformar su núcleo duro en la toma de decisiones. La deuda es quizá el principal foco en Telefónica, con más de 28.000 millones de euros, pero con una sólida tendencia en beneficios e ingresos.
LA AGRADECIDA DESPEDIDA DE ÁLVAREZ-PALLETE
José María Álvarez-Pallete deja el consejo con una extensa carta de agradecimiento a Telefónica y sus empleados tras estar vinculado durante 25 años a la misma. En este sentido, puso en valor los valores y la vocación de servicio, que están en el «ADN de esta gran compañía desde que nació un 19 de abril de 2024».
«Telefónica ha sido para mí mucho más que un lugar de trabajo. Ha sido mi casa y mi escuela. Aquí he conocido a los profesionales más brillantes y mejor preparados. Aquí he crecido junto a todos vosotros», ha afirmado el hasta ahora líder de una de las compañías más potentes de España y a nivel internacional.
«Juntos hemos sido capaces de transformar los desafíos en oportunidades, de convertir lo imposible en posible, de hacer de lo malo algo bueno, y de lo bueno, algo, si cabe, aún mejor. Habéis sido los verdaderos protagonistas», destacó. En este sentido, se deshizo en agradecimiento por haber compartido ilusión y generosidad, así como por los momentos compartidos y que le han regalado, como por cada paso avanzado. «Sobre todo, gracias por haber creído en mí», apostilló.
Álvarez-Pallete ha mostrado gratitud y orgullo, pero al mismo tiempo insta a toda la plantilla a «mantener el mismo compromiso, lealtad y pasión» que han demostrado con él para ponerlo a «disposición del nuevo presidente de Telefónica, Marc Murtra».
«El liderazgo es un viaje que, como la vida misma, se compone de innumerables capítulos. El que ahora comienza, no me cabe la menor duda, estará repleto de oportunidades que permitirán a Telefónica alcanzar nuevas alturas y conseguir nuevos éxitos», aseguró. «El futuro de Telefónica será tan brillante como lo ha sido su pasado y presente», finalizó. Como postdata ha dejado uno de los lemas de la empresa del Ibex 35: «Una vez telefónico, siempre telefónico».
ESCRIBANO, NUEVO JEFE EN INDRA
El cambio de rey en Indra no se ha hecho esperar. Ángel Escribano es el designado por el consejo de administración de Indra, que se reunirá de forma extraordinaria este domingo para ratificarle en el cargo en sustitución de Murtra.
Escribano estará mano a mano con José Vicente de los Mozos, consejero delegado de Indra y designado por Murtra hace 19 meses. De esta forma, Ángel Escribano compartiría la cúpula gestora de Indra con José Vicente de los Mozos, el actual consejero delegado que fue designado para el cargo durante la presidencia de Murtra, en mayo de 2023.
Junto a su hermano Javier, Escribano es el propietario de EM&E Group, líder en el diseño, desarrollo y fabricación de soluciones complejas e innovadoras de Defensa y Seguridad, cuyo crecimiento durante los últimos años ha sido exponencial al calor de las tensiones geopolíticas y tras una alta inversión en I+D+i, en el desarrollo de nuevas tecnologías y en el impulso del talento joven.
EL SEGUNDO MÁXIMO ACCIONISTA DE INDRA
Escribano ostenta actualmente el 14,3% de Indra, una inversión que ronda los 450 millones de euros a precios de cierre de este viernes, y que se coloca como segundo máximo accionista de la compañía, solo por detrás de la SEPI, con el 25,159% del capital.
Escribano cuenta con el beneplácito del resto de accionistas, aunque no se descarta una posible opa sobre Indra por parte de Telefónica para crear un nuevo campeón nacional, según los planes que están encima de la mesa del Gobierno desde el pasado mes de abril.
La entrada de Escribano en el capital de Indra se produjo el 15 de mayo de 2023 con un 3%, elevando la participación al 8% en noviembre de ese mismo año. En diciembre del pasado año, sumó otro seis por ciento adicional, hasta el 14,3% actual.
LA CONTROVERTIDA ENTRADA DE ESCRIBANO A CAMBIO DE COLOCAR A DE LOS MOZOS
La entrada de Escribano Mechanical & Engineering hizo saltar las alarmas en Indra por su relación con algunos altos cargos socialistas, como José Luis Rodríguez Zapatero y José Bono.
El anuncio de compra del 3% en el capital coincidió con el nombramiento de José Vicente de los Mozos, empresario muy ligado al Partido Popular, como consejero delegado y la certeza interna de que el Gobierno y el PP se han puesto de acuerdo para «repartirse» la directiva de Indra.
Desde la compañía deslizaron la entrada de Escribano como un «asalto» en plenas conversaciones entre los populares y el Gobierno. La compra pasó después a ese 10% y no se descarta que llegue incluso a codearse de tú a tú con la SEPI, con el 25% del capital.
La relación entre Escribano e Hispasat es directa. Miguel Ángel Panduro Panadero es el consejero delegado de Hispasat, pero también es consejero de Escribano. En el pasado ejerció como consejero delegado de la empresa pública Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España SA (ISDEFE) durante ocho años como nombramiento directo del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero y José Bono.
CRÍTICAS DEL PP A LOS CAMBIOS EN INDRA Y TELEFÓNICA
Los cambios en Indra y Telefónica han calado negativamente en las filas del PP. La secretaria general, Cuca Gamarra, acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de «colonizar» empresas privadas tras hacerlo con las instituciones públicas.
«Al Gobierno no le basta con colonizar las instituciones públicas, ahora quiere también colonizar empresas privadas», criticó Gamarra. A su juicio, el PSOE extiende «el ‘sanchismo’ aunque sea a costa del prestigio de una de las compañías que es Marca España en el exterior y que es líder internacional también en su sector».