El PSOE de Pedro Sánchez inicia la fagocitación de Sumar y de su líder Yolanda Díaz, en declive y sin gancho suficiente ante las bases. Los socialistas han paralizado la segunda parte de la reforma laboral, que consiste en la bajada del número de horas semanales para todos los trabajadores, al tratar de consensuar la norma con todos los Ministerios económicos, mientras encanta a los votantes de izquierdas con medidas favorables al cambio climático y propuestas desde hace un año por Greenpeace, como es el abono transportes único para toda España.
Yolanda Díaz no logra unificar a los suyos, rotos por las brechas generadas entre los distintos partidos que conforman Sumar y por el escándalo de Íñigo Errejón, denunciado por agresión sexual. Por este motivo, ha centrado sus propuestas en el ámbito laboral, pero lo hace sin consultar nada más que con los sindicatos, muy favorables al recorte del número de horas a cambio de un mismo sueldo, pero sin la voz de los empresarios ni tampoco del resto de Ministerios afectados, especialmente Hacienda y Economía.
Carlos Cuerpo, ministro de esta última cartera, ha puesto freno a las pretensiones de Díaz al asegurar que consultará al resto de los miembros del Ejecutivo sobre los efectos de la reducción de jornada, que se incluyó en el pacto con el PSOE para avanzar hacia una nueva legislatura.
Los traspiés de Yolanda Díaz son una constante en su camino conjunto con el PSOE, hasta el punto de que Podemos se ha visto beneficiado en las últimas elecciones al entender los votantes que votar a Sumar o al PSOE es prácticamente lo mismo. «No hay diferencias y cuando las hay es el PSOE quien lleva la voz cantante», apuntan voces políticas conocedoras de las fuertes diferencias entre los dos socios principales de la coalición.
YOLANDA DÍAZ DESENTIERRA EL HACHA DE GUERRA
Yolanda Díaz se ha comprometido a marcar el paso en la agenda laboral en el inicio de este 2025, dejando atrás la estrategia del silencio mantenida hasta ahora con el fin de evitar airear las diferencias con el PSOE.
La líder de Sumar insistió en la jornada de 37 horas para este mismo año, pero Pedro Sánchez no está dispuesto a ceder terreno para dar oxígeno a su socia de Gobierno. El giro en la estrategia se produce en pleno descenso tanto de los fucsias como de la propia vicepresidenta en las encuestas, siendo una de las ministras peor valorada y con Podemos rugiendo para tratar de recuperar a sus votantes.
Díaz no se ha mordido la lengua a la hora de señalar al máximo responsable de Economía al afirmar que es «casi una mala persona» por el retraso en los trámites de la reducción de la jornada laboral, mientras instó al PSOE a posicionarse ante los trabajadores para dejar claras las intenciones. De hecho, la ministra de Trabajo iniciará una gira por toda España para exigir esta bajada del número de horas laborales.
GREENPEACE APLAUDE A ÓSCAR PUENTE
Si con Cuerpo no ha tenido suficiente, Yolanda Díaz tampoco podrá acercarse a Greenpeace y sus simpatizantes. El ministro de Transportes ha hecho suya una propuesta de Podemos y de la asociación ecologista para hacer realidad el abono transportes único para toda España. La propuesta sobre el papel es brutal. «Viajar en todos los medios de transporte públicos del país con una única tarjeta o con un único sistema», señalan. Asimismo, los títulos estarían bajo un mismo sistema informático por una módica tarifa plana mensual, pero sin acceso al AVE o Avant.
No obstante, a la hora de entrar en el meollo de la cuestión podría haber una invasión de competencias autonómicas, especialmente en Madrid, donde Transportes solo tiene Cercanías frente a la red de autobuses y Metro, que son exclusivos de la región. En este sentido, la propuesta deberá dejar claro si a los precios ofertados supone una merma de ingresos para las Comunidades Autónomas, especialmente en Madrid, que al contrario que Cataluña no tiene la gestión de Cercanías.
El Ejecutivo lo hace en un momento muy tenso judicialmente, con los casos de David Sánchez, el de Begoña Gómez, koldo y el del Fiscal General del Estado encima de la mesa
Greenpeace no era ajena a este escollo al ver necesario la realización de una prueba piloto para medir tanto la capacidad presupuestaria como la coordinación entre las diferentes administraciones públicas. De hecho, si el precio fuera similar a Alemania, donde ya funcionan con este sistema, para quien vive fuera de los núcleos urbanos masificados se vería afectado negativamente al quedar fuera de este sistema los trenes de Alta Velocidad.
LA TRAMPA CON EL ABONO ÚNICO DE TRANSPORTES
De hecho, Andalucía sería una de las afectadas al pagar por esta tarjeta el peso de Cercanías sin disponer de líneas, como ocurre en gran parte de la zona Occidental. Granada, por ejemplo, dijo adiós a todas las líneas de Cercanías el pasado 2023 y solo depende ahora del AVE y del autobús para la movilidad interurbana, mientras en Madrid el Metro se expande cada vez más.
Sería así un sistema injusto que se abonara el mismo precio en toda España al no contar con los mismos servicios. Lo mismo ocurre con otras zonas donde el tren apenas llega. Lo mismo ocurre con Castilla-La Mancha, Extremadura, Castilla y León, Asturias y Galicia, donde el tren solo une núcleos urbanos grandes, olvidándose de los pequeños. No obstante, con cada título, los usuarios sufragan los costes de servicios que no pueden utilizar. Asimismo, está por ver cómo se abonarán los autobuses interprovinciales y con qué redes se podrá utilizar el nuevo abono.
FRANCO PARA TAPAR LA PRESUNTA CORRUPCIÓN
La puntilla del partido de Gobierno contra Sumar se centra en conmemorar los 50 años de la muerte del dictador Franco con 100 actos, de los que ya se ha celebrado el primero.
El Ejecutivo lo hace en un momento muy tenso judicialmente, con los casos de David Sánchez, el de Begoña Gómez, el del Fiscal General del Estado y el caso Koldo encima de la mesa, mientras Sumar aplaude la estrategia del PSOE en todos ellos al considerarlo un ataque al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mientras afirman que «no hay nada» en ninguno de los que afecta a los familiares y a Álvaro García Ortiz, el primer fiscal general imputado en 47 años de democracia.