El toque especial para unas albóndigas en salsa de almendras

Las albóndigas en salsa de almendras son un plato tradicional que ofrece una deliciosa combinación de sabores y texturas. La suavidad de las albóndigas, cocinadas a la perfección, se fusiona con la cremosidad de una salsa de almendras que aporta un toque especial. Esta receta es ideal tanto para una comida familiar como para ocasiones más formales, y su sabor cautivará a todos los comensales. A continuación, descubrirás cómo preparar este delicioso platillo paso a paso.

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Paso a paso para hacer unas exquisitas albóndigas en salsa de almendras

Comienza preparando las albóndigas. Empapa el pan de molde con un poco de leche y resérvalo por unos minutos. Luego, en un bol grande, mezcla la carne molida con el pan empapado, el huevo, el ajo picado, el perejil, sal y pimienta. Amasa todo hasta obtener una masa uniforme. Forma pequeñas bolitas del tamaño de una nuez y resérvalas. En una sartén con un poco de aceite, dora las albóndigas por todos los lados hasta que estén bien selladas, sin cocinarlas completamente, ya que se terminarán de hacer en la salsa.

Para la salsa, comienza sofriendo la cebolla y el ajo picados en una sartén con aceite de oliva hasta que estén dorados y fragantes. Luego, añade las almendras molidas y cocina unos minutos más, removiendo constantemente. Agrega el caldo de pollo y deja que la mezcla hierva durante unos 5 minutos para que los sabores se mezclen bien. Si prefieres una salsa más cremosa, puedes añadir un chorrito de nata o crema al gusto. Cocina la salsa a fuego lento, revolviendo de vez en cuando.

Una vez que las albóndigas estén doradas, agrégalas a la salsa de almendras. Deja que se cocinen a fuego lento durante unos 20 minutos, permitiendo que las albóndigas absorban los sabores de la salsa y se cocinen completamente. La salsa debe espesar ligeramente, volviéndose cremosa y suave. Si es necesario, ajusta el sabor con sal y pimienta al gusto.