En el PSOE no se creían ni una palabra de Víctor de Aldama sobre el caso Koldo o al menos eso es lo que pretendían visualizar desde un inicio. «¿Cómo se va a dar credibilidad a un delincuente confeso?», apuntan fuentes socialistas, que muestran ahora su preocupación debido a la pérdida del control del relato y sin visos de poder frenar la oleada de información que se avecina en este 2025.
Desde el pasado mes de febrero, cuando la UCO de la Guardia Civil detonó la operación Delorme, con la detención de Koldo y Aldama, así como los numerosos registros. De aquella investigación se ha derivado ahora en el caso PSOE, tal y como la definen tanto el PP como Vox, acusaciones populares en el mismo.
Los socialistas y el Gobierno de Pedro Sánchez consideraron que «no había caso», pero Pedro Sánchez prescindió de Ábalos en junio de 2021. Los socialistas afirman ahora que actuaron con rapidez, pero el relato queda cojo cuando se introdujo a Ábalos, a un paso de la imputación formal con el suplicatorio del Supremo al Congreso, en las listas electorales de las generales del 23-J. Poco después, el PSOE abrió un expediente, recurrido por el propio exministro y exnúmero dos del PSOE.
Tras diez meses del inicio de los registros en la casa de Koldo García, el asesor de Ábalos en el Ministerio de Transportes, los socialistas han realizado una encendida defensa de las decisiones de Pedro Sánchez, hasta el punto de montar un relato victimista, con acusaciones a jueces y a la oposición del PP, que juega con «las cartas marcadas». No obstante, el caso Koldo investiga por igual y al mismo tiempo a presuntos corruptores y corruptos, como había ocurrido también en el ‘caso 3%’, que derribó a CiU.
Así las cosas, Aldama habla del reparto de las comisiones con un ‘modus operandi’ centrado en las adjudicaciones públicas a empresas con las que presuntamente se acordó la licitación previamente.
LAS MODIFICACIONES DE CONTRATOS AUMENTARON LAS ADJUDICACIONES ENTRE UN 11% Y UN 16% EN EL CASO KOLDO
En este sentido, la empresa y la Administración o empresa Pública de turno arreglaban un buen contrato con la condición de abonar comisiones para todos, es decir, para el comisionista que juntó a la Administración con la empresa, licitarla al precio convenido, obtener la mejor nota y una vez hecho dar su parte correspondiente al político de turno y a quienes ayudaron en la licitación. No obstante, en la trama Koldo se ha escalado un peldaño más mediante la «modificación de contratos».
Con esta forma de operar, los corruptores se ponían en contacto con las constructoras que habían obtenido los contratos públicos y los modificaban después con sustanciales mejoras, como informó este medio con el 14% o un 16% adicionales que recibió en Cantabria y la V-21, entre otras. Los contratos fueron aportados como parte de la prueba por el testigo de cargo del caso Koldo.
El Ministerio de Transportes realizó un análisis de todos los contratos señalados hasta entonces por los medios, dejando claro que 11 de estas adjudicaciones correspondieron a la etapa de Raquel Sánchez al frente del organismo. Del total, solo seis contratos serían con Ábalos y tres con distintos ministros del PP. De 17 contratos señalados por Aldama no hay constancia de adjudicación alguna, aunque tampoco se ha negado que serían licitados en un plazo de tiempo.
El informe de Óscar Puente se complementa así con los contratos de las mascarillas y otros contratos, como el realizado con Industria, entonces comandado por Reyes Maroto, líder del PSOE y concejal en el Ayuntamiento de Madrid.
LAS MODIFICACIONES EN LOS CONTRATOS SEÑALADOS POR ALDAMA EN EL CASO KOLDO CERCAN A MINISTROS Y JEFES DE GABINETE
«Indiciariamente, es el nexo en común de todos y cada uno de los contratos señalados por Aldama», informan fuentes jurídicadas personadas en el caso. En este sentido, cabe recordar que MONCLOA.com dio buena cuenta del contrato de Maroto en agosto de este año, una licitación que tuvo rectificaciones y numerosas modificaciones con muy poco tiempo entre unas y otras.
Algunas de las licitaciones señaladas apuntan a cambios con aumentos del presupuesto inicial del 14%, como ocurre en el acceso de la M-14 y M-21 a la M-40 para dar servicio al Wanda Metropolitano y en el contrato de Cantabria. El ministro Puente ha actuado en esta causa en dos etapas bien distintas. La primera de ellas realizó una exhaustiva auditoría señalando al exministro y aforado José Luis Ábalos, que ha pedido la nulidad de su causa contra él por el seguimiento realizado por los agentes de la UCO, con fotografías y la incautación de correspondencia privada en la puerta de su casa.
Con Raquel Sánchez se realizaron hasta tres modificaciones, la primera dejó constancia de un aumento del contrato en 2.654.189,79 euros sin impuestos o lo que es lo mismo en 3.211.569,65 euros con impuestos; mientras que en la segunda la subida fue de 554.587,31 euros sin impuestos o bien 671.050,64 contando los tributos.
LAS 21 MODIFICACIONES EN EL CONTRATO DE REYES MAROTO
En el caso de Reyes Maroto, el contrato estaría vinculado con el caso Begoña Gómez, una licitación que tiene numerosas similitudes con las licitaciones aportadas por Aldama en el caso Koldo, con dos fotografías. En una de las instantáneas aparece una nota manuscrita con varios de los contratos, mientras que en la otra es un listado impreso de obras.
Las modificaciones realizadas en los contratos muestran subidas adicionales en las adjudicaciones, partidas supuestamente apalabradas de antemano para evitar levantar sospechas durante la licitación. «Toca ahora demostrarlo y solo la información de Aldama, así como los móviles de Koldo y Ábalos podrían arrojar más luz», destacan las fuentes.
Pero para poder activar estas modificaciones en los contratos debían ganar las empresas señaladas y no siempre han sido así. Según el listado de Aldama, algunas adjudicatarias no lograron llevarse la licitación, mientras que todas las empresas han negado pagar a cambio de obra pública.
el eje principal en todos los concursos públicos vinculados a los casos Koldo y Begoña Gómez son las moficaciones de los contratos públicos
Según las averiguaciones de las fuentes consultadas, Aldama daba las instrucciones a Koldo, éste movía los hilos para llegar a los altos cargos con poder de decisión y después obtenía el visto bueno de la Administración. «Si Aldama necesitó cobrar antes, se lo pedía a Koldo y éste lo conseguía con la influencia y ser el hombre de Ábalos en el Ministerio de Transportes», indican las fuentes. Pero, la acusación no se sostiene si no hay docuemntos que la corroboren, ya sean vídeos, audios o formatos digitales de texto, como las conversaciones aportadas hasta ahora.
ALDAMA LO APUNTA INDICIARIAMENTE
«Aldama ha reconocido supuestos delitos de tráfico de influencias, organización criminal y cohecho, ilícitos penales que trata ahora de imputar a sus más estrechos colaboradores, como Koldo García, el hombre de Ferraz y el «asesor para todo», según desveló José Luis Ábalos», según indican las mismas fuentes consultadas.
Estos cambios en los contratos son «el eje principal en todos los concursos públicos vinculados a los casos Koldo y Begoña Gómez», apuntan. Son «hechos que pasan completamente desapercibidos para el común de los funcionarios que están en la mesa de contratación», al realizarse a posteriori a su adjudicación.
«La licitación se adjudica con una apariencia limpia, incluso con un escaso margen, como ocurrió con Cantabria, pero las modificaciones posteriores no necesitan apenas explicación y es una orden ministerial, firmada por el propio ministro, que se encuentra el papel encima de la mesa como un mero trámite», destacan. Es decir, «si una carretera tiene sobrecostes es normal y lógico pensar que ha ocurrido un aumento en el precio de los materiales, tal y como está la situación actual con la inflación, pero también sirve para repartirse presuntamente el dinero». «Nadie va a mirar donde se destina cada euro», indican.
Nadie va a mirar donde se destina cada euro de las modificaciones de los contratos
El PSOE trata de tumbar esta estrategia alegando que Aldama carece de pruebas y que los papeles entregados ante el Tribunal Supremo no tienen ninguna validez al no estar documentado en ningún soporte la entrega de dinero.
LAS PRUEBAS DE ALDAMA DESMIENTEN AL GOBIERNO
El «nexo corruptor» del caso Koldo asegura que tiene todo en soporte gráfico y en papel, como las fotos que se hizo con Pedro Sánchez en el mitin del partido para presentar a Pepu Hernández como candidato en Madrid, el propio vídeo en el que se ve a Aldama a escasos tres metros del presidente del Gobierno y nuevas fotos en las que está sentado junto a Ábalos en Ferraz, una muestra de que Aldama no era ningún desconocido en lap planta noble en la sede del PSOE, por más que Esther Peña, portavoz socialista, niegue la mayor.
De hecho, el PSOE, adalid de la transparencia, según su propia página web, lleva siete semanas sin realizar la habitual rueda de prensa con los medios. No hay comparecencia y las únicas comunicaciones con el caso Koldo se centran en las denuncias contra Aldama por injurias y delitos contra el derecho al honor. Asimismo, el Ministerio de Transportes, con Óscar Puente al frente, se ha apresurado para elaborar un informe para tratar de desmontar, contrato por contrato, las afirmaciones de Aldama.
El comisionista que se paseaba por los Ministerios de Transporte, empresas públicas, como Adif y Carreteras, así como por Ferraz, ha señalado un total de 96 proyectos, pero especialmente a 16 de ellos. El informe, dividido en dos partes diferenciadas, señala que algunas de las adjudicaciones indicadas no se licitaron, pero sí estaban encima de la mesa. Cabe recordar que el «nexo corruptor» indica que hubo amaños en las «preadjudicaciones».
PUENTE TRATA DE DESMONTAR A ALDAMA, PERO APUNTA A RAQUEL SÁNCHEZ
Además, Aldama apuntó también a obras firmadas por el Gobierno del PP anterior y a otros ministros, como Raquel Sánchez, pero Puente no habló de las modificaciones, que en algunas obras supusieron una rebaja respecto al precio de licitación.
Aldama marco las licitaciones ahora dudosas, mientras que para Transportes y Puente 17 de los 373 contratos detectados no se ha encontrado partida alguna. No obstante, las obras indicadas por Aldama solo pertenecen a Transportes y empresas que dependen directamente del Ministerio al existir otros contratos bajo la sospecha, como los expedientes de las mascarillas, donde se inició todo el caso.
Con todo, el PSOE y el presidente del Gobierno negaron conocer a Aldama, a pesar de las numerosas fotos y vídeos que se han publicado. Y no, por más que se empeñen los socialistas, nadie sin autorización entra en dependencias públicas ni tampoco de forma anónima en un Ministerio ni un jefe de Gabinete se entrevista con empresarios para resolver dudas fiscales, como pretenden hacer creer desde Ferraz.
«Los Ministerios tienen las entradas milimétricamente apuntadas. Saber cuántas veces estuvo Aldama en cada uno de ellos es otra de las pesquisas que debería conocerse», consideran las fuentes jurídicas. Y es que, un ciudadano anónimo y sin una cita no puede deambular por las dependencias y despachos del Ministerio de Transportes o de cualquier otro, como tampoco presentarse y pedir una reunión con un directivo sin que éste lo haya autorizado. «Existe un protocolo muy claro», apuntan. «No es normal ver a empresarios en los Ministerios para resolver dudas», destacan. «Si son fiscales, ahí está la Dirección General de Tributos», apostillan.
Las fuentes se refieren a la encendida defensa de la ministra de Hacienda y vicepresidenta, María Jesús Montero, a su jefe de Gabinete, Carlos Moreno. Montero negó las reuniones con Aldama para después admitir hasta cuatro encuentros de su mano derecha con el «nexo corruptor».
ALDAMA, OBJETO DE BURLA Y DE QUERELLAS
Algo similar le ocurrió a Pedro Sánchez, quien negó haber visto a Aldama, pero a los pocos días no solo se conocía el vídeo de Aldama en el acto de presentación de Pepu Hernández, en un asiento reservado a los VIP, sino que se hizo un reservado a petición del propio presidente del Gobierno porque quería conocer a Aldama, condecorado, además, por la Guardia Civil, un galardón que firmó el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Sin embargo, los ataques desde el Gobierno hacia Aldama han sido continuos con descalificaciones y mofas hacia el empresario por haber asegurado que había colaborado en la lucha de la Guardia Civil y de la CIA. Por el momento, los vídeos y la propia condecoración son hechos, a pesar de los menosprecios de Félix Bolaños, ministro de Justicia, que llegó a comparar a Aldama con un agente de la TIA de Mortadelo y Filemón, mientras otros le equiparan al ‘pequeño Nicolás’. Por el momento, Aldama ha aportado documentación y el juez ha ordenado su excarcelación, mientras la UCO indaga en el material entregado.