En un mundo donde el precio del combustible se ha convertido en una preocupación constante para muchos conductores, la búsqueda de estrategias para optimizar el consumo de carburante se ha vuelto una prioridad. Existen numerosos consejos y trucos que prometen un ahorro significativo, pero pocos han demostrado ser tan efectivos y, a la vez, tan sencillos como el que vamos a desvelar en este artículo. Se trata de una técnica, que podríamos denominar «repostaje ninja», que consiste en alternar el tipo de combustible utilizado en el depósito, con el objetivo de mejorar el rendimiento del motor y, en consecuencia, reducir el consumo.
Este «truco ninja» no es una fórmula mágica, ni una solución milagrosa para todos los problemas relacionados con el consumo de combustible, pero sí una estrategia que, aplicada correctamente, puede generar un ahorro considerable a medio y largo plazo. Consiste en realizar un depósito de diésel con un índice de cetano superior al habitual (e+10) cada tres depósitos de combustible convencional. A simple vista, puede parecer una práctica extraña, incluso contraintuitiva, pero la ciencia detrás de esta técnica se basa en la optimización de la combustión y la limpieza del sistema de inyección. A continuación, analizaremos en detalle el funcionamiento de este método, sus ventajas, sus posibles inconvenientes y las consideraciones que debemos tener en cuenta antes de implementarlo.
1¿CÓMO FUNCIONA EL TRUCO DE REPOSTAJE NINJA?
El «truco ninja» se basa en la utilización periódica de un diésel de alta calidad, con un índice de cetano superior al habitual (e+10), para mejorar la eficiencia de la combustión y limpiar el sistema de inyección del motor. El índice de cetano es una medida de la capacidad de ignición del diésel, y un índice más alto indica una combustión más rápida y eficiente. Al utilizar un diésel e+10 cada tres depósitos, se consigue una combustión más limpia y completa, lo que reduce las emisiones contaminantes y mejora el rendimiento del motor.
La limpieza del sistema de inyección es otro de los beneficios clave de este método, ya que la utilización periódica de un diésel de alta calidad ayuda a eliminar los depósitos de carbón y otros residuos que se acumulan en los inyectores. Estos depósitos pueden afectar negativamente al rendimiento del motor, aumentando el consumo de combustible y las emisiones contaminantes. Al limpiar el sistema de inyección, se mejora la atomización del combustible, lo que permite una combustión más eficiente y completa.
Este método no es una solución universal, y su efectividad puede variar en función de diversos factores, como el tipo de vehículo, el estilo de conducción y las condiciones de uso. Es importante tener en cuenta que el diésel e+10 suele ser más caro que el diésel convencional, por lo que el ahorro obtenido dependerá del precio de ambos combustibles y del consumo del vehículo. Sin embargo, a pesar de este coste adicional, muchos conductores han reportado un ahorro significativo a largo plazo gracias a la mejora en el rendimiento del motor y la reducción del consumo.