La paella, plato emblemático de la Comunidad Valenciana, es mucho más que una simple receta. Es una tradición, una historia, un legado culinario que se transmite de generación en generación. Mi abuela, una experta en el arte de la paella, me enseñó su secreto ancestral para medir el arroz, un método preciso y sencillo que garantiza una paella perfecta, con el arroz en su punto. Este artículo desvela ese secreto, compartiendo una receta tradicional y evocando la magia de la cocina valenciana.
La paella valenciana auténtica, la que se hacía en los campos de arroz, no se basaba en medidas exactas, sino en la experiencia y el conocimiento transmitido de generación en generación. Mi abuela, con sus manos curtidas por el sol y su mirada llena de sabiduría, me enseñó a medir el arroz utilizando un método ancestral, basado en la observación y el tacto. Este método, lejos de ser impreciso, garantiza una paella con el arroz en su punto, ni pasado ni seco, con el grano suelto y sabroso.
2PREPARACIÓN PASO A PASO: EL SECRETO DE MI ABUELA
La preparación de la paella comienza con el sofrito. En una paella grande, se sofríen los ingredientes cárnicos, el conejo y el pollo, hasta que estén dorados. A continuación, se añaden las judías verdes y los caracoles (si se utilizan), y se sofríen durante unos minutos. El sofrito es la base del sabor de la paella, por lo que es importante que esté bien hecho.
Una vez que el sofrito está listo, se añade el arroz, medido con el puño cerrado, y se remueve bien para que se impregne del sabor del sofrito. A continuación, se añade el caldo caliente, aproximadamente el doble de la cantidad de arroz. Se añade el azafrán en hebras, para dar color y aroma a la paella.
Se deja cocer la paella a fuego medio-alto, sin remover, durante unos 15-20 minutos, hasta que el arroz esté en su punto. La clave está en no remover el arroz durante la cocción, para que no se rompa y se mantenga el grano suelto. Al final de la cocción, se deja reposar la paella durante unos minutos antes de servir.