El cordero asado es el plato estrella de las mesas navideñas en Castilla y León, un verdadero emblema de la cocina tradicional que despierta los sentidos y une a las familias. Esta receta es famosa por su sencillez y por la profundidad de sabor que se obtiene con pocos ingredientes y una cocción lenta y cuidadosa. El cordero asado en esta región de España representa más que un plato; es un ritual que se repite cada Navidad y que sigue conquistando a generaciones con su sabor auténtico y reconfortante.
2Cómo preparar este plato que todos quieren tener en su mesa durante la navidad
Hacer este plato es muy sencillo, pero necesita dedicación a la hora de prepararlo. El secreto del cordero asado reside en el respeto al tiempo de cocción y en la técnica simple pero efectiva de preparar la carne. Primero, se sazona el cordero con sal y se deja reposar unos minutos, lo que permite que la carne absorba los sabores de manera uniforme. Después, se frota con un poco de ajo y se coloca en una cazuela de barro, la cual es clave para conseguir la textura adecuada y mantener el calor de manera uniforme durante la cocción.
Una vez en el horno, el cordero asado se cocina lentamente, permitiendo que los jugos se integren y la carne se torne suave y jugosa. Durante la cocción, se añade agua para evitar que el cordero se seque y también se rocía ocasionalmente con su propio jugo, lo cual le da un sabor concentrado y una piel dorada y crujiente. Este proceso lento y meticuloso es lo que transforma la carne en un plato inolvidable, digno de cualquier celebración navideña.