La juventud se moviliza por Valencia y contra el cambio climático. El Sindicato de Estudiantes convoca una huelga general estudiantil para este martes 12 de noviembre, exigiendo justicia y medidas urgentes ante la devastación causada por la reciente DANA.
Esta movilización, que incluirá manifestaciones en toda España, surge como muestra de solidaridad con los estudiantes y las familias afectadas por la reciente DANA en Valencia. La organización estudiantil llama a la participación activa en asambleas y comités estudiantiles en institutos y universidades de todo el país. El objetivo es mostrar un apoyo contundente a las familias trabajadoras y a la juventud valenciana, al tiempo que se expresa un firme repudio a la gestión de la crisis y a los responsables políticos que, según el sindicato, han permitido «estas muertes y esta destrucción con su desidia».
El Sindicato de Estudiantes insta a la comunidad educativa a llenar los centros de «actividad, pancartas y carteles» para visibilizar las demandas de justicia y reparación. Entre sus principales reivindicaciones se encuentra la dimisión inmediata de todo el Gobierno de la Generalitat Valenciana y que se depuren responsabilidades políticas, exigiendo un juicio y castigo ejemplar para los responsables del «sufrimiento y dolor» causados por la catástrofe.
Medidas urgentes y financiación
Más allá de la exigencia de responsabilidades, el Sindicato de Estudiantes plantea un conjunto de medidas urgentes dirigidas tanto al Gobierno central como a las grandes corporaciones. En primer lugar, solicitan al Gobierno la aprobación de un decreto de emergencia que asegure la atención médica gratuita e inmediata para todos los afectados. Además, exigen que las multinacionales se vean obligadas a poner a disposición de la población afectada, de forma gratuita, los alimentos y productos de primera necesidad que se requieran en estos momentos.
Para financiar estas medidas, el sindicato propone que todos los recursos del Estado, incluyendo infraestructuras, transporte y servicios sanitarios, se destinen a solventar la catástrofe. La financiación, según su propuesta, debe provenir de impuestos a los ricos, a la banca y a las grandes empresas.
Entre las medidas más destacadas se encuentran la intervención de hoteles y pisos turísticos para garantizar el alojamiento gratuito de las familias que han perdido sus hogares. También se propone la suspensión del pago de alquileres para las familias afectadas, mediante la aprobación de un decreto de emergencia que impida el cobro de estas rentas, incluso con posterioridad a la situación de emergencia.
El Sindicato de Estudiantes enfatiza la importancia de actuar con rapidez y contundencia, ya que la situación vivida en Valencia «puede ocurrir en cualquier otra zona en cualquier momento». Subrayan la urgencia de abordar el cambio climático, cuyas consecuencias catastróficas, según advierten, fueron predichas por los científicos, pero ignoradas por los gobernantes. Esta lucha, según el sindicato, es por todos aquellos que sufren las «lacras de este capitalismo salvaje y depredador», y es el momento de decir «¡Nunca más!».
Con un llamamiento a la solidaridad y la movilización, el Sindicato de Estudiantes concluye su comunicado animando a la participación en la huelga estudiantil y las manifestaciones del 12 de noviembre. El mensaje es claro: «¡No estáis solas, no estáis solos!». La lucha contra el cambio climático y la defensa de los derechos de los afectados se convierten en el eje central de esta convocatoria, que busca movilizar a estudiantes de todo el país bajo el lema: ¡Por Valencia y contra el cambio climático!.
