Alberto D., un jubilado de 67 años del madrileño barrio de Lavapiés, enfermo y operado de cáncer, denunció a Íñigo Errejón en mayo de 2021 por darle una patada en la calle en el estómago cuando le pidió hacerse una fotografía con él. El vecino denunció aquel incidente y se celebró un juicio en los Juzgados de Plaza de Castilla. Durante el acto del juicio uno de los testigos, un hombre llamado Miguel, relató en el juzgado de Instrucción 16 de Madrid lo que vio aquel 2 de mayo de 2021, pues estaba junto a la víctima y explicó que el diputado «Errejón le pegó una patada violenta, como de kárate». Íñigo Errejón resultó absuelto por falta de pruebas, tras un juicio celebrado al año siguiente de delito leve de lesiones del que fue acusado.
Ahora, tras conocerse la denuncia contra él de una actriz por agresión sexual y comportamientos violentos, Carlos del Arco, el abogado que defendió a la víctima denunciante de aquellos hechos explica a MONCLOA que «hay veces que la verdad judicial no coincide con la verdad real, pero el tiempo pone a todos en su sitio. Cuando nuestro cliente nos llama llorando y nos dice que sabe que hicimos todo lo posible por demostrar la verdad, pero que el muro era muy alto, pero que hoy está feliz porque los españoles ya saben cómo es la persona a la que él denunció por la agresión que a día de hoy él sigue manteniendo que sufrió».
«FUE DECIRLE ESO Y PEGARLE UNA PATADA DE JIUJITSU O ALGO ASÍ»
El testigo relató que «Alberto le vio y le dijo, hombre Errejón, hazte una foto conmigo y Errejón le contestó que no se hacía fotos con nadie y menos a esas horas que ya no trabajaba. Entonces Alberto le dijo que sepas que no te voy a poner bien en las redes. Fue decirle eso y le pegó una patada como si fuera de Jiujitsu o algo así, yo me quedé alucinado». La juez le pregunta entonces «¿una patada violenta?». Y Miguel responde «una patada violenta, como si fuese de kárate, le dio una patada frontal en el estómago, como la que hacen los karatecas».
ERREJÓN FUE ABSUELTO
A pesar de los testimonios, el juzgado absolvió en mayo de 2022 a Errejón al concluir que tras la prueba practicada en el juicio no ha quedado «acreditado que el denunciado propinase una patada al denunciante». Si bien el denunciante mantuvo que Íñigo Errejón «le propinó una patada en el estómago», y éste afirmó que en «ningún momento golpeó al denunciante», las versiones aportadas por los testigos de uno y otro «son claramente contradictorias», añade el juez, al que tampoco han podido ayudar para esclarecer los hechos las cámaras de vídeo de la zona, que «no arrojan luz sobre lo ocurrido, pese al intento de mejora de las imágenes», ya que hasta tres cámaras de seguridad del Ayuntamiento de Madrid grabaron al entonces diputado Errejón y sus dos acompañantes.
En los hechos probados de la sentencia queda únicamente acreditado que el 2 de mayo de 2021, a las 22:50 horas, cuando Íñigo Errejón caminaba por una calle de Madrid en compañía de varias personas, fue abordado por el denunciante, que le solicitó hacerse una fotografía juntos. El denunciado se negó, el denunciante insistió y se produjo una discusión entre ellos. A continuación, cada uno siguió su camino y con posterioridad, el denunciante llamó al teléfono de emergencias de Policía Nacional 091 para denunciar que le había agredido propinándole una patada. Luego interpuso denuncia en la comisaría de Madrid-Centro.
«La prueba practicada –añade el magistrado que firma la sentencia-, no ha evidenciado cómo se produjeron los hechos, si fueron como señala el denunciante o si lo fueron como señala el denunciado. Tan solo resulta probada la petición de la foto por el denunciante, la negativa del denunciado y la discusión posterior entre ellos».
Y «como señala el Tribunal Supremo –manifiesta el juez-, la presunción de inocencia obliga a partir como premisa en el razonamiento de la inocencia del acusado. El principio in dubio, por su parte, no obliga a dudar, sino a absolver cuando valorada toda la prueba persisten dudas sobre la culpabilidad», lo que fue el caso, motivos por los cuales el juez decidió absolver al acusado.
Tras la publicación de aquella denuncia el diputado Errejón salió 24 horas después en rueda de prensa para tildar los hechos de «denuncia falsa». No lo ha hecho ahora, de momento, por la denuncia de agresión sexual interpuesta contra él por la actriz Elisa Mouliaá.
Para el abogado Carlos del Arco, «cualquier español no aforado estaría ahora mismo detenido y su aforamiento deja de existir desde el mismo momento que renuncia a su condición de diputado, a cualquier español que se le denuncia por algo así es inmediatamente detenido. Es el protocolo de actuación policial».
De momento, el ministerio del Interior ya ha dicho por medio de su titular Fernando Grande-Marlaska que los policías «comprobarán la veracidad de los hechos mediante las correspondientes diligencias de investigación», lo que incluye «toma de declaración a familiares, testigos o visionados de imágenes».
Mientras tanto, en las redes sociales ya comienzan a circular denuncias anónimas de al menos seis mujeres que aseguran haber sufrido algún tipo de acoso protagonizado presuntamente por Íñigo Errejón, aunque hasta ahora la única que ha tenido valor para acudir a comisaría y poner una denuncia formal ha sido la actriz Elisa Mouliaá.
