El bosque de Irati es un auténtico paraíso natural, uno de los más grandes y mejor conservados de Europa. Situado en Navarra, este extenso terreno arbolado se extiende a lo largo de más de 17,000 hectáreas, ofreciendo un refugio a una rica diversidad de flora y fauna. En sus senderos, cada paso revela la belleza de un ecosistema único, donde se entrelazan la majestuosidad de los árboles con la melodía del viento y el canto de los pájaros.
2Un legado cultural y un paraíso para los aventureros
El bosque de Irati no solo ofrece belleza natural, sino también una rica historia cultural. Durante siglos, ha sido un lugar sagrado para las comunidades locales, que han aprendido a convivir en armonía con este entorno. Senderos históricos, como el camino de la selva, conectan aldeas y antiguos monasterios, revelando la profunda relación entre el ser humano y la naturaleza en esta región. La tradición de pastoreo y la recolección de setas son solo algunas de las prácticas que se han transmitido de generación en generación.
Para los aventureros, el bosque de Irati es un verdadero playground. Existen múltiples rutas de senderismo que permiten explorar sus secretos, cada una adaptada a diferentes niveles de dificultad. Desde paseos suaves hasta desafíos más exigentes, el bosque ofrece opciones para todos. Quienes eligen recorrer sus caminos se verán recompensados con vistas impresionantes, como el espectacular Mirador de las Campanas, desde donde se puede apreciar la grandeza del paisaje.