El 21 de agosto de 2020 Víctor de Aldama, supuesto comisionista en el centro de la trama mascarillas junto a Koldo García, ex asesor del ministro Ábalos, enviaba «un mensaje de whatsapp a Koldo para remitirle un documento en pdf bajo el título «Presentación control de pasajeros» a Luis Manuel Rubiales, entonces presidente de la RFEF», según recoge el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil presentado en la Audiencia Nacional. La cadena de mensajes finalizó con un whatsapp de Rubiales advirtiendo de que «la llamada ya ha sido realizada». Aquel año, el comienzo y gran parte de la liga de fútbol se celebró a puerta cerrada.
Los investigadores encontraron ese documento en formato pdf en el teléfono de Víctor de Aldama y contenía «una presentación de 23 diapositivas explicando el proyecto de pruebas PCR de Fertinvest y Megalab en aeropuertos», recoge el informe. Hay que recordar que Fertinvest es la empresa que Aldama junto con otros tres socios funda para vender pruebas PCR a diferentes organismos y Megalab es la empresas de uno de sus socios preferentes, Ignacio Díaz Tapia.
«ALDAMA LE INSISTIA EN QUE (KOLDO) LO HICIERA COMO «COSA TUYA»»
Respecto al hecho de que Koldo García remitiese ese documento al entonces presidente del fútbol español, los investigadores escriben que «Aldama le insistía en que lo hiciera «como cosa tuya», se entiende que del propio Koldo, añadiendo «y dile mira, con estos y los camiones que tienen puedes solucionar parte del problema de aforo». De esta manera, Aldama contando con la mediación de Koldo, querría hacer llegar a Rubiales una propuesta para la realización de test de detección del Covid en eventos deportivos -fútbol- con la asistencia de grandes masas de personas».
Poco después de recibir el «encargo» de Aldama, Koldo reenviaba el pdf y «le preguntaba a Rubiales si podía llamarle y le hacía llegar el número de Tapia (Ignacio Díaz Tapia)», recoge la Benemérita en su documento.
El presidente de la RFEF, Luis Rubiales, contestaba a Koldo García a las 15.18 horas del mismo día mediante un mensaje de audio, «donde le indicaba que se iba a poner en contacto con una tercera persona y que el lunes le llamaría el Director de Competición: «Estoy cogiendo ahora mismo el avión para Dusseldorf, en cuanto aterrice en Dusseldorf le pego un toquecillo y le digo que el lunes lo llamar el Director de Competición. Un abrazo grande, Koldo».
Unos minutos después, Tapia reenviaba a su socio César Romero «una serie de mensajes que previamente le habría hecho llegar Aldama. De hecho, entre esos mensajes reenviados se encontraba el audio reseñado anteriormente de Rubiales a Koldo junto con el mensaje «De Víctor». Por lo tanto, puede colegirse como Koldo habría dado cuenta a Aldama de la gestión realizada con Rubiales y, posteriormente, Aldama informaría a Tapia», según refleja el informe de la UCO.
Ya por la tarde Rubiales enviaba un nuevo audio a Koldo García para comunicarle que «la llamada ya había sido realizada y que la semana que viene llamarían a una tercera persona del departamento médico para hablar con él», según los investigadores. El audio de Rubiales decía a Koldo que «lo de la llamada ya ha sido realizada, la semana que viene le llamarán del Departamento médico para hablar con él. Un abrazo grande».
La conversación de ese día terminaba de noche cuando «Tapia remitía una captura de pantalla con la persona responsable de los servicios médicos de la RFEF al grupo de whatsapp Fertinvest», y añaden los investigadores que «el día 1 de septiembre de 2020 Tapia le comentaba a César (Romero) que «mañana he quedado con la directora médica de la Federación», añadiendo «esto también viene por V», lo cual reforzaría que todo lo anterior fue una consecuencia de la relación personal y directa de Aldama, referido en este caso como «V» de Víctor y Koldo», según el documento entregado al juez.
La Guardia Civil también explica que «en aras de reforzar este último extremo, se hace constar el mensaje de fecha 28 de diciembre de 2020 que Tapia mandaba al grupo citando «me acaba de llamar K para la Policía y me ha dicho que si estamos preparados para hacer una comunidad autónoma completa», «me ha dicho que mañana me contaba más», entendiéndose que se abrían así nuevas oportunidades para la organización criminal investigada».
SEMANA JUDICIAL
El Caso Koldo ha retomado esta misma semana la realización de pruebas testificales con la toma de declaración al ex jefe de Presupuestos del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, Jorge Meana, que ratificó que no existieron actas de entrega y recepción de todas las mascarillas adquiridas a la empresa vinculada a la trama, Soluciones de Gestión. Meana explicó esto mismo a la inspectora del del Ministerio de Transportes que realizó la auditoría sobre los expedientes investigados.
Ya entonces, reconoció que no había actas de entrega de Puertos del Estado -ente público al que se le encargó la primera compra de mascarillas a la presunta trama- a Correos, ni a las Comunidades Autónomas, ni a las empresas ferroviarias. También explicó que tampoco existieron actas de entrega individualizadas a los transportistas por parte de Correos.
El pasado lunes también declaraba el presidente de Raminatrans, Rafael Milla, sobre el papel que jugó su empresa en la distribución de las mascarillas adquiridas. Cabe recordar que esa empresa fue la elegida para repartir las mascarillas por España después de que así lo recomendara el entonces presidente de Puertos Francisco Toledo.
En su testifical, y a preguntas de la asociación Liberum, que ejerce la acusación popular, ha explicado que él no estuvo encima de ese asunto dado que fue delegado a dos personas de su mismo grupo empresarial.
Además, ha recordado en sede judicial que cuando fue citado se dirigió al juzgado para ofrecer toda la documentación relativa a actas y para poner sobre la mesa los nombres de las dos personas encargadas, si bien no habría llegado a presentarlo de momento.
Por su parte, el ex secretario general y del Consejo de Correos Julio González ha explicado que si bien habían acordado con Soluciones de Gestión la compra de una cantidad importante de mascarillas por valor de 7,2 millones de euros, finalmente la compra decayó porque ya tenían suficientes y no habría estado justificada esa compra.
El juez investiga a Koldo García -el que fuera asesor del exministro José Luis Ábalos-, el empresario Víctor de Aldama y otras personas por la presunta trama, que habría pagado comisiones para conseguir adjudicaciones para la venta de mascarillas en la pandemia. La Fiscalía Anticorrupción les atribuye presuntos delitos de organización criminal, blanqueo de capitales, cohecho, delitos contra la Hacienda Pública y tráfico de influencias.