Modificación de la Ley Orgánica y su impacto en los presos de ETA: reclamaciones y reparaciones
La reciente modificación de la Ley Orgánica 7/2014 ha generado un gran debate en torno a la situación de los presos de ETA y las posibilidades que esto les ofrece. Sare, la plataforma de apoyo a estos reclusos, ha señalado que hasta 52 condenados por terrorismo podrían beneficiarse de esta reforma, que les permite convalidar las condenas cumplidas en otros países, como Francia. A continuación, se abordarán los puntos más relevantes de esta modificación y su repercusión en el sistema penitenciario español.
¿Quiénes son los beneficiarios de la reforma?
Según la información proporcionada por Sare, 48 de los 52 presos afectados se encuentran en centros penitenciarios vascos, mientras que los otros cuatro cumplen condena en cárceles francesas. En total, actualmente hay 144 reclusos de la banda que cumplen condena en diferentes regímenes, lo que indica que un porcentaje significativo de ellos podría ver alterada su situación.
Además, Sare estima que siete de estos reclusos que cumplieron su condena podrían ser excarcelados este año, lo que generará un efecto domino dentro del sistema penitenciario.
Plazo para solicitar la modificación
Es importante destacar que el proceso para la modificación de la condena no será automático. Serán los propios presos quienes deberán solicitar a la Audiencia Nacional el cómputo de sus penas, un trámite que, aunque necesario, se prevé que genere cierta carga de trabajo en el tribunal. A su vez, se hace un llamado a que este proceso se lleve a cabo con agilidad, pues muchos de estos reclusos han sufrido años de encarcelamiento duplicados y merecen una resolución justa.
Reparación por la «libertad perdida»
Uno de los aspectos más significativos que ha señalado Sare es la posibilidad de que los reclusos efectúen reclamaciones por responsabilidad patrimonial. Como ha mencionado Begoña Atxa, si se demuestra que han pasado más tiempo en prisión del que corresponde, se abre una puerta a que cada preso demande individualmente por el tiempo de libertad que han perdido. Si bien Sare no tiene la intención de iniciar estas reclamaciones como colectivo, cada recluso afectado tiene la opción de hacerlo.
Críticas a la ausencia de reparación
Joseba Azkarraga ha expuesto que, de los 15 presos actualmente en libertad, muchos podrían haber salido de prisión antes si se hubiese aplicado adecuadamente la acumulación de penas. Sin embargo, el sistema no ha garantizado estos derechos hasta ahora, lo que ha llevado a una situación de injusticia que necesita ser corregida.
Fin a una «arbitrariedad»: una modificación necesaria
La modificación de la ley ha sido considerada un avance fundamental para poner fin a la arbitrariedad de tener que cumplir condenas duplicadas en dos países diferentes. A pesar de que algunas voces han intentado asociar esta reforma con una reducción de penas, Azkarraga ha sido claro: no se trata de una rebaja de condenas, sino de un ajuste necesario para devolver al sistema una normalidad jurídica que se perdió hace años.
Impacto de la modificación en el contexto europeo
La reforma se ha realizado en cumplimiento de una directiva europea, que busca establecer normativas justas y coherentes dentro del territorio de la Unión Europea. De esta manera, se garantiza que los derechos de los presos sean respetados y, al mismo tiempo, se evitan situaciones de doble penalización que no tienen cabida en un sistema democrático.
Críticas al PP y la confusión en el debate
Sare ha criticado enérgicamente la actitud del PP durante el debate de esta reforma en las Cortes Generales, calificando su postura como «frívola e irresponsable». Se les ha reprochado el uso político del dolor de las víctimas y la negativa a reconocer que la modificación de la ley también afecta a otros grupos de reclusos, no solo a los condenados por ETA.
Un nuevo enfoque para el sistema penitenciario
Además, Sare ha exigido a la Administración Penitenciaria vasca que no demore las resoluciones sobre el acceso al tercer grado de los presos que cumplen con los requisitos, ya que cada día que pasa representa un día extra de condena injusta que se suma a sus penas.
Propuestas para el futuro del sistema penitenciario
El colectivo ha pedido la derogación de la Ley Orgánica 7/2013, que establece penas de hasta 40 años y perpetúa una situación de excepción que condena a los presos a quedar en un limbo judicial. Con la reforma de la legislación actual, se abre una oportunidad para desarrollar un modelo penitenciario más humano y menos punitivo.
Además, Sare ha dirigido un mensaje a la sociedad, instando a la participación en la manifestación programada para el próximo 11 de enero, con el objetivo de mostrar el apoyo popular hacia la modificación necesaria de la ley y el tratamiento más justo de los reclusos que han cumplido sus condenas.
La modificación de la Ley Orgánica 7/2014 representa un paso importante hacia la justicia para los presos de ETA, permitiendo la convalidación de condenas y la posibilidad de reclamar reparaciones por el tiempo de libertad perdido. Este cambio no solo es relevante para 52 reclusos, sino que también plantea un nuevo escenario para la justicia en España. La sociedad, los legisladores y los organismos judiciales tienen el deber de asegurar que estas reformas se implementen con rapidez y efectividad, logrando así un sistema penitenciario más equitativo para todos.
