El escándalo de las oposiciones en RTVE reactiva la guerra interna entre la dirección y los sindicatos

El culebrón de las oposiciones a Radio Televisión Española (RTVE) continúa. Mientras desde la Corporación Pública llaman a la calma cada día hay una filtración (interesada) nueva. Cristina Ónega, directora del Canal 24 Horas, según señalan algunos medios de comunicación fue la miembro del tribunal de la oposición que presentó, acompañada del representante legal de la cadena estatal, la denuncia el sábado 28 de septiembre al saberse que se había filtrado el examen al menos a 160 personas.

Desde entonces se ha ido filtrando como un goteo. Todas han ido apuntando en la misma dirección: el origen de la filtración estaba en un miembro del tribunal, más en concreto en uno de los elegidos por los sindicatos.

El diario El Mundo informaba en el 3 de octubre de que todos los sindicatos, con excepción de UGT (Unión General de Trabajadores) y SI (Sindicato Independiente), es decir, CCOO (Comisiones Obreras), CGT (Confederación General del Trabajo) y USO (Unión Sindical Obrera) firmaron un documento en el que se aseveraba que ningún miembro del tribunal elegidos por ellos filtró el examen.

Conforme se va soltando más información, que parece tener un origen claro, más apuntan todas a una misma persona, un representante de uno de los sindicatos que, por cierto, no han firmado el documento del que habla el diario de Unidad Editorial.

LOS SINDICATOS NO TIENEN TODA LA INFORMACIÓN

Mientras se espera a que la investigación policial estreche aún más el cerco, desde TVE hacen saber que han iniciado «una exhaustiva investigación interna para esclarecer los hechos». Sin embargo, esto no sería legal. Cuando algún suceso está siendo susceptible de investigación judicial y policial no están permitidas las investigaciones internas.

Esto podría ser un brindis al sol. Mientras tanto, desde los sindicatos se vuelve a levantar el hacha de guerra contra la dirección de la Corporación. Una guerra que parecía estar en un momento más tranquilo, pero que este asunto ha dejado entrever que la brecha abierta sigue supurando.

Desde las organizaciones sindicales han denunciado a MONCLOA que la cadena no ha querido compartir con ellos el contenido de la denuncia preceptiva que se presentó. En El Mundo, por su parte, desde Televisión Española afirman que «toda la documentación relativa a estos hechos está bajo investigación policial por lo que la Corporación mantiene la oportuna confidencialidad y recuerda el debido respeto al derecho a la presunción de inocencia».

EL DIFÍCIL PAPEL DE CONCEPCIÓN CASCAJOSA

Este escándalo llega en el peor momento para la presidenta de la Corporación. El PSOE apuesta por mantener a Concepción Cascajosa al frente de Radio Televisión Española pese a que el mandato interino de la presidenta de la Corporación se iba a prorrogar simplemente por 6 meses, y la fecha se ha cumplido este pasado 27 de septiembre.

El PSOE pretende prorrogar el mandato de Cascajosa, que podría estar en manos de su antecesora Elena Sánchez. La expresidenta, y hoy consejera, tendría en su mano la continuidad de la presidenta interina.

A priori, Cascajosa cuenta con 4 votos asegurados (incluido el suyo) y necesitaría que Elena Sánchez o el otro verso suelto del Consejo, José Manuel Martín Medem se abstengan al alimón en vez de sumarse al ‘no’ de los 3 consejeros propuestos por el Partido Popular. La abstención de 1 de los 2, a priori, garantizaría la continuidad de Cascajosa.

En la actualidad, la presidenta Cascajosa solo cuenta con 3 apoyos fieles: Juan José Baños, que es uno de los gurús mediáticos del PNV; Roberto Lakidan, de CCOO, afín a Podemos y artífice del fichaje de Pablo Iglesias por RTVE; y el histórico Ramón Colom, que ha vuelto a la senda socialista. El bloque del PP también cuenta con 3 personas fieles: Jenaro Castro, Carmen Sastre y Consuelo Aparicio.

Y, por último, existen 2 versos sueltos, y defensores de una concepción clásica de gobernar RTVE, que decantan las votaciones del Consejo: la expresidenta Elena Sánchez (que suele evitar hacer pinza con los ‘populares’, pero sigue dolida con La Moncloa por haber propiciado su cese) y José Manuel Martín Medem (director del Mundo Obrero del PCE).