Esta crema de verduras asadas es la manera de comer verde sin pasar un mal trago

La crema de verduras asadas es una receta perfecta para disfrutar de un plato reconfortante y lleno de sabor, pero sobretodo, de nutrientes. Este tipo de crema, ideal tanto para días fríos como cálidos, tiene la capacidad de satisfacer a todos en la mesa gracias a su textura suave y su profundo gusto a vegetales recién asados. La crema de verduras asadas puede servirse como entrada o como un plato principal ligero, y siempre deja un gusto impecable en quienes la prueban, ya que la combinación de sabores al hornear los ingredientes resalta cada uno de ellos, aportando un toque ahumado y dulce que no se encuentra en otras cremas.

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Paso a paso para hacer esta nutritiva y deliciosa crema

El primer paso para esta crema de verduras asadas consiste en preparar el horno a unos 200 grados, asegurándose de que esté bien caliente para que los vegetales se caramelicen adecuadamente. Coloca los pimientos, el calabacín, la berenjena, la cebolla, la zanahoria y el ajo en una bandeja, previamente cortados en trozos medianos. Al asarlos, el objetivo es que los vegetales adquieran un color dorado y una textura blanda, lo cual tardará aproximadamente 30 a 40 minutos. Este proceso es crucial, ya que al asar las verduras se intensifican sus sabores y se logra el perfil único que hace que esta crema de verduras asadas destaque.

Una vez que las verduras estén asadas y perfectamente caramelizadas, es hora de mezclarlas. Coloca todos los vegetales en una licuadora o procesador de alimentos, agregando el caldo de verduras poco a poco para conseguir la consistencia deseada. Es fundamental probar la crema de verduras asadas mientras se mezcla, para ajustar la sal y la pimienta según el gusto. La idea es lograr una textura suave y cremosa, sin grumos, que se deslice fácilmente por el paladar.

El toque final de la crema de verduras asadas viene con un poco de creatividad. Se puede servir con un chorrito de aceite de oliva por encima, unas hojas frescas de albahaca o incluso unos crutones para darle un contraste crujiente. Este plato no solo es delicioso, sino también muy versátil, y se puede adaptar a los gustos y preferencias de cada uno. Además, es una opción maravillosa para aprovechar cualquier verdura que esté en temporada, haciendo que cada crema de verduras asadas sea única.