Esta semana comienza el juicio contra los acusados de cometer un terrible crimen en Cartagena en 2019. La víctima, un hombre de 35 años residente en Moratalla, fue asesinado durante una transacción de drogas en la que los perpetradores intentaron robarle 34.000 euros. Este caso, que se llevará a cabo ante el Tribunal del Jurado, promete ser un proceso judicial de alta complejidad y emoción, en el que se buscará hacer justicia por este lamentable hecho.
Los Acusados y sus Delitos
Los seis acusados en este caso enfrentan diversos cargos. Tres de ellos – A.V.G, J.M.G.M. e I.P.G. – son señalados como los perpetradores directos del asesinato y robo con violencia, mientras que los otros tres – R.R.T, L.J.R.T y O.F. – son acusados de encubrimiento.
A.V.G. se había ganado la confianza de la víctima, J.A.M.F., a lo largo del 2019, estableciendo una relación comercial de compraventa de drogas. La víctima, que acudía regularmente al domicilio de A.V.G. en Pinoso (Alicante) para adquirir sustancias estupefacientes, llegó a visitar el lugar en hasta ocho ocasiones, sintiéndose seguro por las transacciones anteriores exitosas. Los tres acusados de asesinato acordaron entonces acabar con la vida de la víctima para sustraerle más fácilmente los 34.000 euros que portaba, y así evitar que pudiera denunciarlos.
Cuando la víctima llegó al domicilio el 20 de junio de 2019, los dos otros acusados de asesinato lo estaban esperando. Allí, lo abalanzaron y lo estrangularon. Posteriormente, vaciaron la bolsa con el dinero y se repartieron el botín, entregando 1.000 euros al acusado I.P. por su participación. Los tres acusados principales lograron disponer por completo del dinero robado, el cual aún no ha sido recuperado.
La Ocultación del Crimen y sus Consecuencias
Después del asesinato, los acusados ocultaron el cadáver, transportándolo a una finca en las afueras de Pinoso, donde lo quemaron y enterraron. Los hermanos R.R.T. y L.J.R.T., quienes tenían conocimiento de los delitos pero no participaron directamente, llevaron a cabo diversas acciones para evitar que la policía los descubriera, como esconder y destrozar el vehículo de la víctima. El sexto acusado, O.F., también realizó actividades de encubrimiento.
El cuerpo de la víctima, José Alonso Marín Fernández, no fue localizado por la Policía Nacional hasta el 8 de noviembre de 2020, casi un año y medio después del crimen.
Por estos hechos, el Ministerio Fiscal solicita 30 años de prisión para cada uno de los tres acusados principales por asesinato y robo con violencia, lo que suma un total de 90 años de privación de libertad. Para los otros tres, acusados de encubrimiento, se piden 3 años de prisión para cada uno. Además, los seis acusados deberán indemnizar a la familia de la víctima por los daños morales y económicos causados.
Este caso sin duda conmoverá a la opinión pública y pondrá a prueba la capacidad del sistema judicial para hacer justicia por este lamentable crimen. La búsqueda de la verdad y la reparación para los allegados de la víctima serán los ejes centrales de este juicio de alta complejidad.