Churros irresistibles en freidora de aire: menos grasa, todo el sabor

Los churros, ese delicioso manjar que evoca recuerdos de ferias, desayunos en familia o tardes de invierno, han conquistado paladares alrededor del mundo. Tradicionalmente fritos en abundante aceite, su textura crujiente y dorada los convierte en una irresistible tentación. Sin embargo, muchos los evitan por su alto contenido en grasa. Afortunadamente, con la llegada de la freidora de aire, es posible disfrutar de unos churros igualmente sabrosos, pero con menos aceite y un resultado mucho más saludable.

Hacerlos en una freidora de aire no solo reduce el contenido graso, sino que también facilita la preparación. Ya no es necesario preocuparse por los salpicones de aceite ni por el olor persistente en la cocina. Con unos simples ingredientes y siguiendo el procedimiento adecuado, cualquiera puede disfrutar de unos churros crujientes, ligeros y llenos de sabor, con un mínimo de complicaciones.

Ingredientes para hacer churros crujientes

Ingredientes para hacer churros crujientes

Para comenzar con la preparación, es importante contar con todos los ingredientes a mano. Para una receta que rinde aproximadamente para 4 personas, se necesitarán: 200 ml de agua, 75 g de mantequilla, 150 g de harina, 3 huevos, 3 cucharadas de azúcar, una pizca de sal y aceite de girasol para pincelar los churros antes de la cocción. Aunque el proceso es sencillo, tener las cantidades precisas es clave para obtener la textura ideal de la masa de los churros.

Con estos ingredientes, lo primero que debes hacer es hervir el agua, la mantequilla y la sal en una olla. Una vez que la mantequilla se haya derretido, se baja el fuego a una intensidad media. Después, se añade la harina y se remueve la mezcla hasta obtener una masa homogénea que se despegue fácilmente de las paredes de la olla. En este punto, la base de la masa debe adquirir un ligero tono marrón, lo que indica que está lista para continuar.

El truco para que queden perfectos

El truco para que queden perfectos

Un detalle crucial en la preparación de churros es dejar reposar la masa unos minutos para que se enfríe. Luego, se incorporan los huevos uno a uno, mezclando con una cuchara para que la masa sea suave y manejable. Esta masa se coloca en una manga pastelera con una boquilla en forma de estrella, ideal para dar a los churros su característica forma estriada. A partir de aquí, los churros deben formarse sobre una bandeja con papel de horno, cortándolos en tiras de entre 5 y 10 cm.

El truco que muchos desconocen es congelar los churros antes de cocinarlos en la freidora de aire. Dejar reposar los churros en el congelador durante al menos dos horas garantiza que mantengan su forma al cocinarlos. Este paso es esencial para obtener churros que, una vez en la freidora de aire, quedarán dorados por fuera y suaves por dentro. Una vez congelados, los churros se colocan en la cesta de la freidora de aire y se pincelan ligeramente con aceite de girasol. Esto les dará un acabado dorado y crujiente, similar al de la fritura tradicional.

Se programan entre 10 y 15 minutos a 180 °C, controlando que se doren uniformemente. Para finalizar, se dejan enfriar un par de minutos antes de espolvorearles azúcar al gusto. Este toque final les da ese toque irresistible que los caracteriza. Y lo mejor de todo es que, al haber usado la freidora de aire, los churros resultan mucho menos grasos, sin perder su textura ni sabor.