En una decisión histórica, el pleno del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha aprobado por mayoría la retirada de la Medalla de Oro y el título de Hijo Adoptivo otorgados al dictador Francisco Franco. Esta medida, que cuenta con el apoyo de todos los partidos presentes excepto Vox, marca un importante hito en el compromiso de la ciudad por honrar la memoria democrática y reparar a las víctimas de la represión franquista.
La alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Carolina Darias, ha destacado el simbolismo de esta decisión, recordando la conmovedora carta escrita por el guardia municipal Alberto Hernández Suárez, quien fue fusilado tan solo siete días después de escribir dichas palabras. Con este gesto, la ciudad se reconcilia con quienes han sido represaliados o han sufrido las consecuencias de la represión, honrando la verdad, la justicia y la reparación.
LA RETIRADA DE LOS HONORES A FRANCISCO FRANCO
La retirada de los honores a Francisco Franco en Las Palmas de Gran Canaria se enmarca en el cumplimiento del artículo 40 de la Ley 20/2022, de 19 de octubre, de Memoria Democrática. Esta decisión refleja el compromiso del gobierno municipal por defender la memoria democrática y la dignidad de todas las víctimas franquistas.
La alcaldesa ha destacado que con esta acción, Las Palmas de Gran Canaria se convierte en una ciudad más decente, despojando de los honores a un dictador cuyo nombramiento como Hijo Adoptivo y otorgamiento de la Medalla de Oro fueron realizados por una Comisión Gestora que no fue elegida democráticamente.
Darias también ha agradecido la labor «ímproba e incansable» de los colectivos de memoria histórica en el reconocimiento y la reparación de las víctimas y sus familiares. Asimismo, ha reafirmado el compromiso del ayuntamiento por seguir buscando a quienes aún no han sido encontrados, con el objetivo de conocer sus identidades, sus historias y conservar los testimonios para concienciar y evitar que los pasajes más oscuros de la historia no vuelvan a repetirse.
EL COMPROMISO CON LA MEMORIA DEMOCRÁTICA
El compromiso ético y político del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria con la memoria democrática se traduce en la retirada de los vestigios de aquella época, reafirmando la búsqueda de la verdad, la obtención de justicia y la consecución de la reparación.
La alcaldesa ha subrayado que esta decisión representa un paso importante en la reconciliación de la ciudad con su pasado, honrando a quienes fueron víctimas de la represión y asegurando que los pasajes más oscuros de la historia no vuelvan a repetirse.
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha demostrado su firme compromiso con la memoria democrática y la dignidad de todas las víctimas franquistas, reconociendo la necesidad de reparar a aquellos que han sido silenciados y olvidados a lo largo de la historia. Esta decisión representa un importante avance en el camino hacia la reconciliación y la justicia histórica.