Así funcionaba la estafa de Cryptospain y Madeira Invest Club: 2.000 € para empezar a invertir

Ya hay una querella interpuesta de manera oficial en la Audiencia Nacional contra Madeira Invest Club y su principal responsable, Álvaro Romillo Castillo, conocido por sus seguidores como Luis o CryptoSpain. Han sido los grupos Afectados Denunciantes y la Asociación de Afectados por Inversiones en Criptomonedas con la representación legales de Zaballos Abogados. Han denunciado a 23 personas jurídicas y 6 personas físicas por los delitos de estafa continuada, apropiación indebida, publicidad engañosa, organización criminal y blanqueo de capitales en la Audiencia Nacional. La querella recoge el modus operandi de lo que está considerada una estafa piramidal, podías comenzar a operar sólo si entregabas antes 2.000 euros.

Son más de 100 denunciantes y se están reclamando más de 15 millones de euros, aunque cifran la cantidad estafada a los afectados que han denunciado en más de 30 millones. Sin embargo, aseguran a MONCLOA que la cifra de damnificados reales podría rondar las 3.000 personas y la cantidad presuntamente estafada podría alcanzar los 600 millones de euros.

Eso sólo en España. Se buscan también los damnificados en América lo que incrementaría tanto el número de posibles denunciantes como la cantidad de dinero presuntamente estafada.

Según la querella presentada por los abogados Emilia Zaballos y Francisco Jimenez Aguilera, Álvaro Romillo «ofrecía financiar activos de lujo (vehículos, embarcaciones, inmuebles…) a cambio de percibir importantes intereses a medio y largo plazo».

MODUS OPERANDI

‘Luis’ (Álvaro) Romillo Castillo se hizo popular en YouTube y otras redes como Cryptospain. En su contenido difundido en redes defendía trucos para evitar la fiscalidad española y siempre aparecía con el rostro cubierto por una mascarilla. En base a su popularidad creó Madeira Invest Club.

Los afectados ingresaban en este club financiero de Inversores, el conocido como Madeira Invest Club. Entrar en dicho club no era barato, tenían que desembolsar la cantidad de 2.000 euros anuales. Este era el gancho. Se accedía así a la posibilidad de adquirir todo tipo de obras (casas, vehículos de lujo, embarcaciones, relojes de coleccionista, obras de arte…). En los contratos se les ofrecía la posibilidad de recuperar lo invertido con creces. En ocasiones por encima del 30% y llegando en algunos casos al 53%.

Sin embargo, según la querella, desde el club se les incitaba a volver a comprar e invertir. «Lo que ha provocado que la mayoría jamás haya percibido beneficio alguno». Los pagos por estas inversiones se hacían en transferencia bancaria, en criptomonedas e incluso depositando dinero en una caja fuerte que estaba en Madrid, de la empresa Sentinel BQ. Según los demandantes, era un proyecto paralelo dedicado a la custodia de oro, dinero en efectivo y criptomonedas «con el objetivo de facilitar la elusión fiscal».

Los letrados de los afectados recuerdan que «la mayoría de los inversores han quedado atrapados en unas inversiones que no existen o no valen apenas nada y que ponen de manifiesto que se trata de una estafa piramidal».

MOVIMIENTOS SOSPECHOSOS

Ya en mayo de 2023 en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMC) advirtió de las actividades de Madeira Invest Club. Pero ha sido en las últimas semanas cuando las actitudes de los implicados levantaron sospechas.

El 17 de septiembre cesó repentinamente y sin avisar la actividad de las webs de Madeira Invest Club y del propio Cryptospain (Álvaro Romillo Casitllo). Se vació además todo el contenido en redes sociales. Además, hicieron un comunicado echando la culpa del bloqueo del dinero a la CNMV y a la Agencia Tributaria, sin aportar ni una sola prueba ni un dato coherente.

Otro movimiento curioso fue, según la querella, «dejaron testaferros con unos cambios de administradores muy sospechosos en los últimos meses. Tratando así de evadir una futura responsabilidad». «Desde el primer momento todo este entramado se ha montado con el único objetivo de apropiarse de las inversiones del mayor número de afectados posibles», añaden.

El pasado mes de agosto Álvaro Romillo Castillo, ajeno al escándalo que se desataría semanas después, alardeaba de vivir en un lujoso yate, con bandera maltesa, junto a su familia. A principios de 2024 el barco atracó en Málaga después de visitar lugares como Ibiza, Mallorca, Albania, Mónaco o los Emiratos Árabes Unidos. El yate está valorado en 23 millones de euros.