La producción de fruta de hueso se eleva un 3% más

España ha experimentado una excelente campaña de producción de fruta de hueso, con un incremento de más del 3% respecto a la temporada anterior y un 9% por encima de la media de los últimos cinco años. Este notable desempeño se debe a factores climáticos favorables y a la continua optimización de los procesos productivos por parte de los agricultores españoles.

La albaricoque es el producto estrella, con una producción prevista de 152.929 toneladas, lo que representa un 41% más que el año pasado y un 26% por encima de la media de las últimas cinco temporadas. Por su parte, la cereza también ha experimentado un aumento significativo, alcanzando las 137.183 toneladas, un 31% más que en 2023 y un 25% por encima de la media.

Récord en Exportaciones de Fruta de Hueso

Las exportaciones de fruta de hueso han superado las 550.000 toneladas hasta julio, lo que supone un 13,3% más que el año anterior y un 3,7% por encima de la media de las últimas cinco campañas. El valor de estos envíos al exterior ha alcanzado los 963 millones de euros, un 8,7% más que en la campaña pasada y un 17,8% por encima de la media del periodo 2019/2023.

Estos resultados positivos también se reflejan en el consumo de los hogares españoles, con un 12% más en volumen que en el mismo período del año anterior y un 3,4% por encima de la media de los últimos cinco ejercicios.

Previsiones Optimistas para la Fruta de Pepita

Además de la fruta de hueso, la industria frutícola española también tiene buenas perspectivas para la próxima campaña de fruta de pepita (manzana y pera). Aunque se espera una ligera reducción en la producción total, la manzana mantendrá niveles estables, con 555.280 toneladas, un 5% más que en 2023 y casi en línea con la media de los últimos cinco años.

La pera, por su parte, sufrirá una mayor disminución, con una previsión de alrededor de 252.500 toneladas, un 12% menos que en la campaña 2023/24 y un 16% por debajo de la media de las últimas cinco temporadas. Esta reducción se debe principalmente a la sequía que afectó a las principales zonas productoras, como Cataluña y Lleida.

En resumen, la industria frutícola española se encuentra en un momento de auge, con récords de producción, exportaciones y consumo interno de fruta de hueso, y unas perspectivas prometedoras para la próxima campaña de fruta de pepita, a pesar de algunos desafíos climáticos puntuales.