Hemos encontrado un sustituto más sano que el azúcar y la sacarina para tu café

El azúcar ha sido, por generaciones, el endulzante más común en todo el mundo. Está presente en muchas de nuestras comidas y bebidas, y su consumo ha crecido a la par que los riesgos asociados a su ingesta. Problemas como la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares están estrechamente vinculados a su abuso, lo que ha llevado a las personas a buscar alternativas para reducir su impacto negativo en la salud.

En esta búsqueda, los edulcorantes artificiales, como la sacarina, la sucralosa o el aspartamo, se han presentado como soluciones que evitan el aporte calórico del azúcar. Sin embargo, cada vez más estudios revelan que el consumo prolongado de estos sustitutos no solo no ofrece los beneficios esperados, sino que puede acarrear otros problemas para la salud, como la alteración del metabolismo o desequilibrios en la flora intestinal.

Canela: una opción natural para reemplazar el azúcar

Canela: una opción natural para reemplazar el azúcar

Para quienes no pueden imaginar su café sin un toque de dulzura, existe una alternativa mucho más saludable que los edulcorantes industriales: la canela. A diferencia del azúcar, la canela no aporta calorías y, además, es rica en propiedades beneficiosas para el organismo. Su capacidad para regular los niveles de glucosa en sangre y sus efectos antioxidantes y antiinflamatorios la convierten en un ingrediente ideal para quienes buscan cuidar su salud.

Añadir una pizca de canela al café no solo mejora su sabor, sino que también ayuda a acelerar el metabolismo, mejorando el proceso digestivo y contribuyendo a la pérdida de peso. A diferencia de la miel, que también se usa como endulzante, la canela es una opción más económica y no eleva los niveles de azúcar en sangre, lo que la hace ideal para personas que deben controlar su glucosa.

Tipos de canela y cuál es mejor

Tipos de canela y cuál es mejor

No toda la canela es igual, y es importante conocer las diferencias. Las dos variedades más comunes son la canela de Ceilán y la canela cassia. La primera, conocida como la «canela verdadera», es originaria de Sri Lanka y tiene un sabor más delicado, aunque su precio es más elevado. En contraste, la canela cassia, que proviene de China y es más común en Europa, es más barata pero contiene altas concentraciones de cumarina, una sustancia que puede resultar tóxica para el hígado si se consume en grandes cantidades.

La canela de Ceilán, aunque más cara, es la opción recomendada para el consumo regular, ya que no presenta los riesgos asociados a la cumarina. Esto la convierte en una alternativa más segura y saludable para aquellos que desean utilizarla como sustituto diario del azúcar en el café u otras bebidas.

La canela, además de ser una fuente natural de sabor, aporta nutrientes como el calcio, el hierro y las vitaminas C y B1, lo que la convierte en una excelente adición a la dieta diaria. Su uso no solo reduce la necesidad de edulcorantes artificiales, sino que también mejora la salud digestiva y contribuye a la regulación del azúcar en la sangre.