Preparar unos deliciosos saladitos de hojaldre es fácil y versátil, y estoy seguro de que con estos ganarías alguna que otra prueba de ‘MasterChef’. Puedes disfrutarlos como aperitivo diario, en el vermú del fin de semana o en cualquier celebración en casa. Con una lámina de hojaldre rectangular, puedes dividirla en 4 partes iguales y rellenarlas con atún y tus ingredientes favoritos.
En poco más de media hora, tendrás unos bocados deliciosos que pueden servirse tanto templados como fríos. Además, combinan perfectamente con una cervecita fría o tu vino preferido. ¡No hay excusa para no probarlos!
2PREPARAR LOS INGREDIENTES DE LOS SALADITOS
Hierve agua en una olla lo suficientemente grande como para que quepa el huevo. Una vez que el agua esté hirviendo, cuidadosamente coloca el huevo en el agua utilizando una cuchara. Cocina el huevo durante 11/12 minutos. Este tiempo asegurará que la yema esté completamente cocida. Una vez transcurrido el tiempo, retira el huevo del agua caliente y sumérgelo en un recipiente con agua tibia para detener el proceso de cocción. Esto facilitará pelar el huevo más tarde.
Retira la masa de hojaldre del envase y desenrolla con cuidado manteniendo el papel de la base. Es importante no retirar el papel, ya que ayudará a manipular la masa sin que se pegue. Utiliza un rodillo para estirar ligeramente la masa, asegurándote de que tenga un grosor uniforme. Corta la masa en cuatro tiras iguales a lo largo para crear las bases de los saladitos. Abre la lata de atún y escurre bien el aceite. Luego, desmenuza el atún con un tenedor para que sea más fácil distribuirlo sobre las tiras de hojaldre. Trocea los pimientos del piquillo en trozos pequeños y pica finamente el huevo cocido.