En una reunión celebrada recientemente en La Moncloa, el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el Lehendakari de Euskadi, Imanol Pradales, abordaron los avances en el traspaso de competencias a la comunidad vasca. El Gobierno reconoce que este proceso, que debe concretarse a lo largo del año 2025, conlleva pasos y dificultades, pero mantiene su objetivo de cumplir con los plazos acordados con el Gobierno Vasco.
Durante el encuentro, Pradales presentó a Sánchez un calendario «realista» que incluye la gestión y ordenación del litoral antes de finalizar 2024. Posteriormente, el Ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, compareció para expresar la voluntad del Gobierno Central de cumplir con estos plazos establecidos en el pacto de investidura entre el PSOE y el PNV en noviembre de 2023.
EL COMPROMISO DEL GOBIERNO CENTRAL CON LOS PLAZOS ESTABLECIDOS
El Ministro Torres señaló que Sánchez manifestó su «compromiso» de que a finales de octubre se lleve a cabo una comisión bilateral para continuar avanzando en competencias como las de salvamento marítimo, ordenación y gestión del litoral, entre otras. Estas cuestiones, según Torres, requieren informes técnicos y jurídicos de los ministerios involucrados y, por lo tanto, tienen «sus singularidades». No obstante, el Ministro reiteró que la voluntad de ambos gobiernos es cumplir con los plazos establecidos.
Asimismo, Torres defendió que hasta el momento han cumplido con los plazos acordados y recordó que durante la primavera, entre marzo y abril, se concretaron varios avances en este proceso de transferencia de competencias.
LOS PASOS Y DIFICULTADES EN EL TRASPASO DE COMPETENCIAS DE SEGURIDAD SOCIAL
A pesar de la voluntad manifiesta del Gobierno Central, el traspaso de las competencias sobre la Seguridad Social a Euskadi, que debería llevarse a cabo a lo largo del año 2025, tiene sus pasos y dificultades, según reconocen las fuentes gubernamentales. Estos desafíos requieren una coordinación y articulación cuidadosa entre los diferentes ministerios y organismos involucrados para garantizar una transición fluida y exitosa.
Uno de los principales retos será asegurar la integración de los sistemas informáticos y la armonización de los procedimientos administrativos entre el Gobierno Central y la Comunidad Autónoma. Además, se deberán abordar cuestiones relativas a la gestión de los recursos humanos, la transferencia de fondos y la adaptación normativa para que el traspaso de competencias se realice de manera eficiente y sin interrumpir la prestación de los servicios a la ciudadanía.
A pesar de estas complejidades, el Gobierno mantiene su compromiso de cumplir con los plazos acordados con el Gobierno Vasco. Este proceso representa un hito en la descentralización y la transferencia de competencias, y requerirá de una estrecha colaboración y coordinación entre ambas administraciones para asegurar su éxito.