El Banco Sabadell es una institución financiera española de gran relevancia en el mercado bancario nacional. Recientemente, la entidad ha anunciado el pago de un dividendo a cuenta que representa una rentabilidad del 4% sobre el precio de cotización actual de sus acciones. Este hecho refleja la solidez financiera de la entidad y su compromiso con la remuneración de sus accionistas.
La decisión del Banco Sabadell de abonar este dividendo a cuenta de 8 céntimos por acción el próximo 1 de octubre supone un desembolso de 429 millones de euros, una cifra que es un 33% superior a los dos dividendos en efectivo pagados con cargo a los resultados del ejercicio 2023. Esta medida demuestra la confianza del banco en su capacidad de generación de beneficios y su clara orientación hacia la creación de valor para sus accionistas.
Política de Remuneración al Accionista
El presidente de la entidad, Josep Oliu, ha manifestado «excelentes perspectivas de mejora de la rentabilidad para los próximos años» y que se generará valor a largo plazo para los accionistas. Este dividendo a cuenta forma parte de la política de remuneración al accionista del Banco Sabadell, que prevé remunerar a sus accionistas con 2.900 millones de euros con cargo a los ejercicios 2024 y 2025, equivalente a 53 céntimos por acción y a cerca del 28% sobre la cotización actual.
Crecimiento y Valor a Largo Plazo
Este primer dividendo a cuenta supone un 15% del total previsto para el periodo, en el que se abonarán 45 céntimos por acción más. Esto demuestra el compromiso del Banco Sabadell con la generación de valor a largo plazo para sus accionistas. Además, una vez cerrado el ejercicio, el consejo de administración presentará a la junta general ordinaria de accionistas la propuesta del dividendo final, así como la distribución del exceso de capital, incluyendo el importe equivalente a la parte pendiente de ejecución del programa de recompra de acciones anunciado el pasado mes de abril.
En resumen, el anuncio de este dividendo a cuenta por parte del Banco Sabadell refleja su solidez financiera, su compromiso con la remuneración de los accionistas y su clara orientación hacia la creación de valor a largo plazo. Estas excelentes perspectivas de la entidad bancaria sin duda serán bien recibidas por el mercado y sus inversores.
