España, con su gran riqueza cultural y geográfica, comparte fronteras con rincones fascinantes de otros países de Europa. Uno de esos tesoros se encuentra a tan solo 40 kilómetros de su frontera, en Francia. Se trata de Villefranche-de-Conflent, un encantador pueblo medieval que ha sido reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este destino, tan cercano a España, es un tesoro que merece ser descubierta por aquellos que desean sumergirse en la historia y la belleza natural.
2Este pueblo es maravilla a sus visitantes con su patrimonio arquitectónico y ambiente medieval
El principal atractivo de Villefranche-de-Conflent es su sorprendente fortaleza. Construida por orden del mariscal Vauban en el siglo XVII, la fortaleza de Libéria se alza majestuosa sobre el pueblo, ofreciendo unas vistas espectaculares de los Pirineos. Esta construcción, parte del conjunto de fortalezas declaradas Patrimonio de la Humanidad, es un recordatorio del vínculo estratégico entre Francia y España, una frontera que ha sido históricamente disputada y defendida.
Además de su patrimonio arquitectónico, Villefranche-de-Conflent también es famoso por ser el punto de partida del famoso Tren Amarillo, una de las rutas ferroviarias más pintorescas de Europa. Este tren, que serpentea por los Pirineos, es una experiencia imperdible para quienes llegan desde España y desean explorar los paisajes montañosos que unen ambos países. La conexión entre España y Francia se siente en cada tramo del recorrido.