Valencia, conocida por su vibrante vida urbana y su increíble oferta cultural, también es el punto de partida perfecto para explorar algunos de los pueblos más bonitos de la Comunidad Valenciana. A solo unos pocos kilómetros de la ciudad, se encuentran encantadores destinos que combinan historia, naturaleza y tradición.
En esta ocasión queremos mostrarte tres pueblos, cada uno con su propia magia, que sin duda son paradas obligatorias para aquellos que deseen una escapada tranquila sin alejarse demasiado de la capital.
1Altea y Morella, dos encantadores pueblos de Valencia
El primero en la lista es Altea, un hermoso pueblo costero ubicado a unas dos horas en coche de Valencia. Altea es famosa por sus casas blancas, callejones empedrados y su impresionante iglesia con cúpula azul, un símbolo de la localidad. Recorrer las calles de Altea es como retroceder en el tiempo, con sus tiendas de artesanía y sus vistas panorámicas al Mediterráneo. Los visitantes encuentran en Altea un refugio perfecto para relajarse, disfrutar de la brisa marina y perderse entre sus laberintos pintorescos.
Otro pueblo que merece una parada obligatoria es Morella, uno de los más espectaculares de la Comunidad Valenciana. Ubicado a unas dos horas y media al norte de Valencia, Morella resalta por su imponente castillo medieval que domina el paisaje desde lo alto de una colina. Este pueblo fortificado parece sacado de un cuento de hadas, con sus murallas, torres y casas de piedra. Los turistas que viajan a este lugar suelen quedar maravillados con la historia que se respira en cada rincón de Morella, además de disfrutar de su gastronomía tradicional, como el famoso flaó, un delicioso postre local.