Patatas con costillas de cerdo, un guiso sencillo y reconfortante

Las patatas con costillas de cerdo son un guiso tradicional que ofrece una combinación perfecta de sabores y texturas. Este plato, simple pero reconfortante, es perfecto para cualquier ocasión en la que desees disfrutar de una comida casera y sabrosa. La magia de las patatas con costillas de cerdo radica en su capacidad para combinar ingredientes básicos y convertirlos en una comida que reconforta el alma y satisface el apetito.

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Cómo prepararás unas exquisitas patatas con costillas de cerdo

El procedimiento para preparar patatas con costillas de cerdo comienza con dorar las costillas en una cazuela con un poco de aceite de oliva. Este paso es fundamental, ya que el dorado de la carne intensifica su sabor y le da una textura muy apetecible. Una vez que las costillas estén bien doradas, retíralas y en la misma cazuela, añade la cebolla y el ajo, cocinándolos hasta que estén tiernos y fragantes. A continuación, reincorpora las costillas a la cazuela y añade la zanahoria y las patatas, dejando que se mezclen bien con los otros ingredientes.

Para darle el toque final a las patatas con costillas de cerdo, agrega el puré de tomate y suficiente caldo de carne para cubrir todos los ingredientes. El laurel y el pimentón se añaden en esta etapa para realzar los sabores. Cocina el guiso a fuego lento durante aproximadamente una hora, o hasta que las patatas estén tiernas y las costillas se deshagan fácilmente. Durante la cocción, es importante remover ocasionalmente para evitar que el guiso se pegue al fondo de la cazuela y para asegurarse de que todos los sabores se mezclen de manera uniforme.