Las primeras labores de reconocimiento aéreo realizadas este viernes en el noreste de Gran Canaria por parte del Gobierno de Canarias y Salvamento Marítimo descartan la presencia de restos de combustible en altamar procedentes del vertido de fueloil que se produjo este miércoles en el Puerto de La Luz. Sin embargo, sí se han detectado restos en el litoral de Telde y de Las Palmas de Gran Canaria.
Ante esta situación, el Ejecutivo regional ha mantenido la declaración de emergencia en nivel 2 del PLATECA (Plan Territorial de Emergencias de Protección Civil de la Comunidad Autónoma de Canarias) para continuar con la vigilancia y seguimiento del vertido, ya que no se descarta que en los próximos días puedan seguir llegando a la costa partículas procedentes del combustible derramado.
LABORES DE LIMPIEZA EN EL LITORAL
Los trabajos de limpieza en el litoral se iniciaron esta misma mañana, tras las labores de reconocimiento en zonas del litoral de Las Palmas de Gran Canaria y Telde. Estas tareas corren a cargo de cinco cuadrillas de operarios de Gesplan, movilizados y formados por la Dirección General de Emergencias para esta misión.
Las labores de limpieza se están realizando de forma manual piedra a piedra, y se centran hoy viernes en el área que abarca la Playa de La Restinga hasta el Barranco del Real de Telde, la zona donde se ha producido la mayor concentración del vertido.
Finalmente, en total, más de 60 efectivos trabajan en las labores de control del vertido de fueloil y de limpieza del litoral de las zonas afectadas.
COORDINACIÓN Y SEGUIMIENTO DEL PLAN DE EMERGENCIA
La coordinación y seguimiento de las acciones para hacer frente a este incidente se está llevando a cabo a través de la reunión del PLATECA, en la que participan representantes de la Delegación del Gobierno, Puertos de Las Palmas, Capitanía Marítima, Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, Salvamento Marítimo y otros organismos implicados.
Estas reuniones periódicas permiten evaluar la evolución de la situación y tomar las decisiones oportunas para reforzar las medidas de contención y limpieza, así como para informar a la ciudadanía sobre el desarrollo de los acontecimientos.
El Gobierno de Canarias y los demás organismos competentes mantienen un estrecho seguimiento y coordinación con el objetivo de minimizar el impacto ambiental y garantizar la seguridad de las personas y el entorno afectado por este vertido de fueloil en el Puerto de La Luz de Gran Canaria.