Phoenix, Arizona, una de las ciudades más grandes de Estados Unidos, ha experimentado un período de calor extremo sin precedentes. Durante cien días consecutivos, las temperaturas han superado los 37 grados Celsius, un fenómeno que ha puesto de manifiesto la creciente influencia del cambio climático en la región.
La magnitud de este evento ha generado una profunda preocupación entre los expertos, quienes señalan que el cambio climático ha intensificado la duración y la frecuencia de las olas de calor, aumentando el riesgo para la salud pública y el medio ambiente.
El Cambio Climático como Factor Determinante del Calor Extremo
La organización científica Climate Central ha analizado los datos climáticos de Phoenix y ha concluido que el cambio climático ha jugado un papel crucial en la ola de calor. De acuerdo con su análisis, el calor extremo experimentado en 32 de los 100 días ha sido dos veces más probable debido a la influencia humana en el clima.
Climate Central ha desarrollado una herramienta llamada Índice de Cambio Climático, que permite identificar la huella del cambio climático en eventos meteorológicos extremos. Esta herramienta ha revelado que en 45 días de la racha de calor, las temperaturas registradas fueron influenciadas por el cambio climático, mientras que el día 9 de junio fue considerado «casi imposible» sin el calentamiento global.
Pronósticos de Calor Extremo en Estados Unidos
Las predicciones meteorológicas para el territorio estadounidense muestran que la ola de calor se intensificará en las próximas semanas, con temperaturas que podrían alcanzar o superar récords históricos. La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha emitido alertas de calor extremo para la costa oeste y el suroeste del país, incluyendo Phoenix.
Los pronósticos indican que las temperaturas máximas para el desierto del suroeste podrían alcanzar los 43.3 grados Celsius, mientras que el sur de California experimentará temperaturas entre 37.7 y 43.3 grados Celsius. Los valles centrales de California se enfrentan a temperaturas de 40 grados Celsius, mientras que el centro y norte de California, así como el noroeste del Pacífico, experimentarán temperaturas entre 32.2 y 37.7 grados Celsius.
En contraste con la ola de calor en el oeste, la Costa del Golfo se prepara para fuertes lluvias e inundaciones repentinas. Un frente estacionario y una baja costera provocarán varios días de lluvias y tormentas eléctricas generalizadas en la región.
El calor extremo en Phoenix y las predicciones de intensificación de la ola de calor en Estados Unidos son una clara evidencia de los impactos del cambio climático en nuestro planeta. Es fundamental que las autoridades y la sociedad en general tomen medidas urgentes para mitigar el cambio climático y adaptarnos a sus consecuencias, asegurando la salud y bienestar de las generaciones presentes y futuras.
