La gestión de la inmigración se presenta como uno de los desafíos más complejos de la actualidad. La llegada masiva de personas en busca de un futuro mejor, la necesidad de políticas de integración y el debate sobre los límites de la solidaridad son temas que ocupan un lugar central en la agenda política. En este contexto, el Lehendakari, Imanol Pradales, ha propuesto un acuerdo «estructural» para la migración, enfatizando la necesidad de una gestión coordinada entre las diferentes regiones y una mayor atención a las políticas de integración.
Pradales ha destacado que el marco legal europeo, concretamente la directiva sobre devoluciones, establece las bases para la gestión de la inmigración irregular. Sin embargo, ha enfatizado la importancia de considerar también los derechos humanos de las personas que huyen de conflictos o de situaciones de pobreza extrema, ya que «pueden encontrarse en una situación en la que están huyendo de una guerra».
La Importancia de un Pacto Estructural para la Gestión de la Inmigración
El Lehendakari considera que la actual situación requiere un «acuerdo y un pacto estructural» que aborde las necesidades de integración y la gestión de los recursos. En este sentido, ha defendido la necesidad de un reparto equitativo de la responsabilidad en la acogida de los refugiados, especialmente en el caso de los menores no acompañados. A su juicio, «no podemos tener nosotros los recursos sobrepasados y comunidades limítrofes que no tengan apenas menores no acompañados».
Además, ha planteado la necesidad de trabajar en el origen para evitar la emigración irregular y fomentar la formación profesional en los países de origen, con el objetivo de facilitar la llegada de trabajadores cualificados a Europa.
Tolerancia Cero con la Delincuencia y el Reto de las Armas Blancas
En materia de seguridad, el Lehendakari ha defendido la importancia de la prevención y la tolerancia cero con la delincuencia. Ha reconocido que la percepción de inseguridad es un problema real en algunas ciudades vascas, pero ha destacado que la Ertzaintza ha logrado reducir la tasa de delitos durante el último verano gracias a una mayor coordinación y prevención.
Pradales ha planteado la necesidad de analizar la eficacia del actual Código Penal en el contexto de la proliferación de armas blancas. En su opinión, es necesario «mirar a los ojos» esta nueva realidad y «intentar dar una solución». Ha reconocido que la posesión de armas blancas no siempre es un delito, pero ha expresado su preocupación por la creciente expansión de este tipo de objetos y la necesidad de «atajar de alguna manera» esta situación.
