La Industria Manufacturera de la Eurozona Continúa en Declive

La actividad manufacturera de la eurozona ha experimentado un nuevo revés en agosto, repitiendo la caída registrada en los dos meses anteriores. El índice PMI se situó en 45,8 puntos, reflejando el peor nivel del año hasta la fecha. Esta situación se debe principalmente a una contracción «pronunciada» en los nuevos pedidos y a la caída más marcada de las ventas totales hasta el momento, lo que ha impulsado a los fabricantes a intensificar los esfuerzos de reducción de gastos.

Esta persistente disminución en la actividad manufacturera ha generado un escenario complejo para la economía de la eurozona. Los fabricantes han respondido a la disminución de la demanda implementando estrategias de contención, incluyendo la reducción de la compra de insumos, el ajuste del empleo y la reducción de inventarios. Esta situación pone en riesgo la sostenibilidad de la producción en el corto plazo, particularmente ante la creciente importancia de los pedidos pendientes de entrega como factor de apoyo.

Un Panorama Desalentador para el Sector Manufacturero

La caída de la producción, aunque ligeramente más lenta que en meses anteriores, se ha visto fuertemente impactada por la disminución de los nuevos pedidos, que ha alcanzado el ritmo más acelerado desde febrero. Las empresas han implementado medidas de reducción de gastos, incluyendo una disminución «sustancial» en los volúmenes de compra, la más pronunciada desde abril. El volumen de ‘stocks’ de compras se ha contraído por decimonoveno mes consecutivo, mientras que el ‘stock’ de productos acabados también ha experimentado una disminución, aunque a un ritmo más lento.

El empleo en el sector manufacturero ha continuado en declive, sumando quince meses consecutivos en negativo. Este ajuste del personal coincide con una disminución en la confianza empresarial. Las expectativas de crecimiento de la producción a doce meses vista han alcanzado su nivel más débil desde marzo, ubicándose por debajo de la media a largo plazo de la serie.

Presiones Inflacionarias Persisten en el Sector

Por tercer mes consecutivo, los fabricantes han informado de un aumento en los costes. La tasa de inflación se ha desacelerado «ligeramente», pero se mantiene cerca del máximo de dieciocho meses registrado en julio. A pesar de la evolución de los nuevos pedidos, los precios de venta se han incrementado por primera vez desde abril de 2023, aunque esta inflación ha sido «modesta».

Alemania y Francia, las dos grandes economías de la zona euro, han ejercido la mayor presión negativa sobre el sector industrial en agosto. Únicamente Grecia, España e Irlanda han registrado un crecimiento, aunque los ritmos de expansión se han ralentizado en los dos primeros casos.

La situación actual presenta un panorama sombrío para el sector manufacturero de la eurozona. «La situación está yendo cuesta abajo y sin freno. El sector manufacturero sigue estancado en su desaceleración, ya que las condiciones empresariales han empeorado al mismo ritmo sólido durante tres meses consecutivos, llevando la recesión a un agotador periodo de 26 meses y contando», ha expresado Cyrus de la Rubia, economista jefe de Hamburg Commercial Bank.

La disminución de los nuevos pedidos, tanto a nivel nacional como internacional, ha generado un escenario poco favorable para una pronta reactivación del sector. «Los nuevos pedidos, tanto nacionales como internacionales, se están atenuando aún más, impidiendo cualquier esperanza a corto plazo de una reactivación», ha concluido De la Rubia.