Dejar de fumar casi reduce a la mitad el riesgo de infarto; reducir el consumo no es suficiente

Dejar de fumar es una de las decisiones más importantes que una persona puede tomar para mejorar su salud a largo plazo. Aunque a menudo se cree que simplemente reducir el consumo de tabaco es suficiente, un estudio reciente ha demostrado que dejar de fumar por completo es la única manera de reducir significativamente el riesgo de eventos cardiovasculares graves.

El estudio, presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología 2024, analizó el impacto del tabaquismo en pacientes con enfermedad coronaria estable. Los hallazgos fueron contundentes: los pacientes que dejaron de fumar en cualquier momento después de su diagnóstico redujeron su riesgo de sufrir un evento cardiovascular importante en casi un 50 por ciento. En contraste, aquellos que simplemente redujeron su consumo de tabaco no vieron una mejora significativa en sus resultados cardiovasculares.

Importancia del Momento de Dejar de Fumar

La clave parece estar en el momento en que los pacientes dejaron de fumar. El estudio reveló que el primer año después del diagnóstico de enfermedad coronaria fue crucial. De los pacientes que eran fumadores en el momento del diagnóstico, el 72,8 por ciento logró dejar de fumar en ese primer año, mientras que solo el 27,2 por ciento lo hizo en los años posteriores.

Esto subraya la importancia de que los profesionales de la salud aprovechen el «momento oportuno» después del diagnóstico para enfatizar la necesidad de dejar de fumar y brindar el apoyo necesario a los pacientes. Cuanto antes un paciente deje de fumar, mejor será para reducir su riesgo cardiovascular.

Impacto a Largo Plazo de Dejar de Fumar

Incluso años después de dejar de fumar, los exfumadores aún no alcanzan el mismo nivel de riesgo cardiovascular que aquellos que nunca han fumado. El estudio encontró que el riesgo de eventos cardiovasculares adversos mayores aumenta un 8 por ciento por cada año adicional de tabaquismo activo.

Sin embargo, los beneficios de dejar de fumar son innegables. Los pacientes que dejaron de fumar en algún momento después de su diagnóstico lograron una reducción del 44 por ciento en el riesgo de eventos cardiovasculares importantes, en comparación con aquellos que continuaron fumando.

En contraste, reducir simplemente la cantidad de tabaco consumido no tuvo un impacto significativo en los resultados cardiovasculares. Esto subraya que para obtener los mayores beneficios para la salud, lo más importante es dejar de fumar por completo.

Conclusión

Este estudio proporciona evidencia convincente de que dejar de fumar es la única forma efectiva de reducir significativamente el riesgo cardiovascular en pacientes con enfermedad coronaria. Los profesionales de la salud deben aprovechar el momento del diagnóstico para motivar y apoyar a los pacientes en este desafío, ya que el primer año es crucial.

Además, el estudio muestra que nunca es demasiado pronto ni demasiado tarde para dejar de fumar, aunque cuanto antes lo haga un paciente, mejor será para su salud cardiovascular a largo plazo. Este mensaje poderoso debe transmitirse con claridad a todos los fumadores, independientemente de su estado de salud actual.