La reforma fiscal en España es un tema que ha estado en la agenda política durante los últimos años, y la actual vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha vuelto a poner el foco en esta cuestión. Según sus declaraciones, el sistema tributario español «mira al pasado» y no se adecúa a las realidades del presente, por lo que considera urgente llevar a cabo los cambios necesarios.
El Gobierno ya se había comprometido a impulsar una reforma fiscal como parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, ligado a los fondos europeos ‘Next Generation EU’. Sin embargo, para Yolanda Díaz, esto no es suficiente. La ministra cree que es necesario abordar una reforma «pendiente» con el objetivo de «tener mejores servicios públicos».
Una Tributación Anticuada y la Necesidad de una Redefinición Moderna
Según Yolanda Díaz, el sistema de tributación actual en España «mira al pasado y no al presente». Esta afirmación pone de manifiesto la percepción de que la estructura fiscal del país no se ha adaptado adecuadamente a los cambios económicos y sociales de las últimas décadas. Una reforma fiscal integral podría ser la oportunidad para actualizar y modernizar el modelo tributario, haciéndolo más acorde con las realidades del siglo XXI.
La ministra también ha señalado que el debate sobre la reforma fiscal no debe centrarse únicamente en «si hay que subir o bajar impuestos», sino en una «redefinición moderna de la carga tributaria y de quién tiene que pagar». Esta visión sugiere la necesidad de un enfoque más amplio y equilibrado, que tenga en cuenta la capacidad de pago de los diferentes sectores de la sociedad y las nuevas formas de generación de riqueza.
Luchar Contra el «Escaqueo Fiscal» y Mejorar los Servicios Públicos
Yolanda Díaz ha manifestado su «convicción de que hay escaqueo fiscal» en España, lo que implica la existencia de prácticas de evasión o elusión fiscal que deben ser abordadas. Una reforma fiscal eficaz debería ir acompañada de medidas para combatir la evasión y elusión fiscal, con el objetivo de lograr una recaudación más justa y equitativa.
Además, la vicepresidenta segunda ha señalado que la mejora de los servicios públicos es uno de los principales objetivos que deben perseguirse a través de la reforma fiscal. Esto sugiere que los ingresos obtenidos a través de un sistema tributario más moderno y eficiente deberían destinarse a fortalecer y mejorar la calidad de los servicios públicos, como la educación, la sanidad o la seguridad social, lo que redundaría en un mayor bienestar para la ciudadanía.
En resumen, la propuesta de Yolanda Díaz de llevar a cabo una reforma fiscal en España responde a la necesidad de actualizar un sistema tributario que, según su percepción, se encuentra desfasado y no se ajusta a las realidades actuales. Esta iniciativa busca modernizar la carga tributaria, combatir el «escaqueo fiscal» y destinar los recursos recaudados a la mejora de los servicios públicos, con el objetivo de construir un modelo económico y social más justo y equitativo.
