La Comisión Europea ha presentado su propuesta de capturas para el mar Báltico, buscando un equilibrio entre las necesidades de conservación y las demandas de la industria pesquera. Esta propuesta refleja un enfoque minucioso y a largo plazo para garantizar la sostenibilidad de los recursos marinos en la región.
Aumento Selectivo de Cuotas de Pesca
La propuesta de la Comisión Europea contempla un aumento significativo en las posibilidades de pesca para el arenque, con un incremento del 108% en el Báltico central y del 10% en el golfo de Riga. Este movimiento busca satisfacer la creciente demanda del mercado sin comprometer la salud de las poblaciones pesqueras.
Por otro lado, la Comisión mantiene una política restrictiva en el caso del salmón y el bacalao. Para el salmón, se propone una reducción del 36% en la cuenca principal y del 20% en el golfo de Finlandia, respondiendo a la preocupante caída en las tasas de reproducción. En cuanto al bacalao, se plantean recortes aún más pronunciados, del 73% para el bacalao del Báltico occidental y del 68% para el del Báltico oriental, siguiendo las recomendaciones de los expertos científicos que indican que la población sigue en un estado delicado.
Conservación y Recuperación de Especies Vulnerables
Más allá de los ajustes en las cuotas, la propuesta de la Comisión Europea incluye medidas de acompañamiento para la recuperación de las poblaciones de bacalao y salmón. Desde 2019 se han implementado estrategias específicas para revertir el declive de estas especies, y la Comisión busca reforzar estos esfuerzos, incluyendo, por ejemplo, la prohibición de la pesca recreativa de salmón criado, que impacta negativamente en las poblaciones silvestres.
El delicado equilibrio entre las necesidades de conservación y las demandas de la industria pesquera es un reto constante para la Comisión Europea. Esta propuesta de capturas para el mar Báltico refleja un enfoque cuidadoso y a largo plazo, buscando preservar la riqueza de los ecosistemas marinos mientras se atienden las preocupaciones de los sectores productivos. Los próximos pasos serán clave, ya que los países de la UE deberán examinar y adoptar esta propuesta durante la próxima reunión de ministros en octubre.
