Costa Brava es un destino famoso por sus playas paradisíacas, pueblos encantadores y por su rica oferta gastronómica, pero pocos saben que esta región también alberga algunas de las bodegas más interesantes de Cataluña. Enclavadas entre el mar y las montañas, estas bodegas brindan una experiencia única a sus visitantes, combinando paisajes espectaculares con la posibilidad de degustar vinos de excelente calidad.
Si estás pensando en recorrer la Costa Brava, aquí te presentamos 3 bodegas que debes visitar sí o sí para disfrutar de una experiencia memorable.
1Celler Espelt
La primera parada obligatoria en la Costa Brava es Celler Espelt, una bodega situada en el corazón del Alt Empordà. Este lugar destaca no solo por la calidad de sus vinos, sino también por su compromiso con la sostenibilidad y el respeto al entorno natural. Rodeada de viñedos que se extienden hasta donde alcanza la vista, Espelt ofrece visitas guiadas que permiten conocer de cerca el proceso de elaboración, desde la vid hasta la botella.
Además, esta bodega cuenta también con una cata de vinos impresionante, que te permitirá saborear su gama de blancos y tintos, con denominación de origen Empordà, mientras disfrutas de unas hermosas vistas panorámicas de la Costa Brava.
