Junts no cederá a las exigencias del Gobierno de Pedro Sánchez ni del PSOE tras intentar la captura de Carles Puigdemont en su primera huida con orden de detención tras visitar durante 48 horas la ciudad de Barcelona. Los independentistas buscan una solución a la fractura interna, pero no dejarán de lado el «choque» con el PSOE y Sumar. «Ya les tumbamos el techo de gasto e incluso el primer intento de la amnistía», recuerdan las fuentes consultadas por este medio.
Junts entierra así el optimismo mostrado por Yolanda Díaz, líder de Sumar y vicepresidenta segunda del Gobierno, quien se ha mostrado confiada y «segura» para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado (PGE), pese a no presentar las cuentas de 2024 y tener que prorrogarlas, y se trabaja para llegar a un acuerdo para las próximas de 2025.
Según Yolanda Díaz, se llegará a un acuerdo con Junts con el diálogo, pero no hay nada que ofrecer hasta el momento debido a la fallida ley de Amnistía para Puigdemont, una situación que ha tensado las cuerdas con el PSOE, más tras el pacto entre el PSC y ERC para aupar a Salvador Illa a la presidencia de la Generalitat.
LA DIVISIÓN DE JUNTS, EL PRINCIPAL ESCOLLO DE PEDRO SÁNCHEZ
No obstante, con la división de Junts y la posible llegada de un núcleo más duro que el formado por Puigdemont y Jordi Turull, el diálogo está más que entredicho. «Puigdemont se dio un cruel baño de realidad. Solo 10.000 personas en su reaparición y no hay fuerza interna que sostenga esta situación. No se puede pactar con el PSOE y perder la Generalitat al mismo tiempo. Lo hemos perdido todo, incluso el efecto sorpresa», han apuntado fuentes críticas con la dirección del partido. Estas fuentes consideran que «hay que reestructurar de nuevo la formación, buscar un argumentario sólido y con el objetivo de conseguir la independencia con España».
Preguntado sobre los posibles candidatos a suceder a Puigdemont, los críticos tratan de convencer a las asociaciones para reunir el consenso de 2012 y «plantar cara al Estado y a la Generalitat de Salvador Illa» con una oposición de «confrontación, combativa». Una muestra de esta tensión interna será la manifestación de la Diada del próximo 11-S, donde la Assemblea Nacional Catalana tratará de superar los ridículos números ofrecidos en los últimos años.
«No solo están los Presupuestos», apuntan las mismas fuentes. «Turull afirmó que había que replantear las negociaciones con el PSOE, pero firmaron un acuerdo de legislatura», apuntan las fuentes. «Fue un pacto plagado de inconcreciones, más allá de la amnistía», destacan las fuentes. «Ni siquiera esa ley se ha cumplido», afirman. Turull debe romper relaciones y el diálogo con los socialistas hasta hacer cumplir con lo firmado. «Ese es su mandato. Cualquier otra opción incumpliría los acuerdos con la militancia», sostienen.
LOS CRÍTICOS DE PUIGDEMONT PIDE EL CUMPLIMIENTO DE LA PROMESA
Con todo, Pedro Sánchez no podría aprobar los Presupuestos de 2025 hasta al menos bien entrado este otoño, dejando así un margen muy escaso para aprobar las cuentas del próximo año, dado que con una inflación manteniéndose en niveles altos y un riesgo de recesión dejaría a España en una difícil situación para abordar una nueva crisis.
Por ahora, Junts tan solo tiene la baza del bloqueo en el Congreso de los Diputados para presionar a Pedro Sánchez, una vez que ERC ha dado el poder autonómico a la Generalitat de Salvador Illa. En el tintero quedan aún varias leyes, como la ley del Suelo, el desarrollo de la nueva ley de Vivienda, la rebaja de la jornada laboral y la subida de impuestos.
Los críticos destacan la promesa de Carles Puigdemont si no llegaba a la Plaza Sant Jaume, pero el líder de Junts se niega a abandonar antes de tiempo. Para ello, los dirigentes de la formación independentista han adelantado su congreso dos años, para celebrarlo en octubre, y fijar las posiciones, así como los apoyos a la estrategia. Por el momento, los críticos se movilizan para hacer cumplir a Puigdemont su promesa.
PODEMOS PUEDE DAR AÚN UN REVÉS A YOLANDA DÍAZ
Si Junts finalmente se descuelga del pacto de legislatura con el PSOE, Pedro Sánchez tendrá muy complicado poder continuar en La Moncloa. Las voces de los críticos apuntan que la situación sería insostenible en diciembre, con elecciones en pleno invierno, mientras que Sumar y Podemos se encararán por los próximos recortes que exige Bruselas para cumplir con los objetivos.
Los ‘morados’ están muy molestos por el reparto en el Consejo General del Poder Judicial y ya le dieron una sonada derrota a Yolanda Díaz en la Cámara Baja. Sin próximos Presupuestos, Pedro Sánchez podría aguantar aún unos meses más y no se descarta tampoco unas elecciones en plenas vacaciones de Semana Santa, coincidiendo así con días festivos, como está acostumbrado en los últimos años.
