Europa y la viruela del mono están bajo control, asegura experto

La viruela del mono, también conocida como mpox, ha vuelto a captar la atención mundial tras la detección de una nueva variante genética en 2024. Este resurgimiento ha llevado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a elevar la alerta sanitaria, despertando preocupaciones sobre su potencial propagación. Sin embargo, expertos como Salvador Peiró, investigador en Medicina Preventiva y Salud Pública de Fisabio, aseguran que la situación actual dista mucho de ser comparable a la pandemia de COVID-19.

A pesar de que el escenario en Europa se percibe como controlable, la situación en África Central es particularmente alarmante. La República del Congo, sumida en décadas de conflictos armados, enfrenta una transmisión generalizada del virus. Las condiciones de hacinamiento entre la población desplazada y la dificultad para prestar asistencia médica y vacunar complican aún más el panorama. Esta realidad subraya la importancia de una respuesta global coordinada para prevenir la propagación del virus a otras regiones del mundo.

La transmisión y sintomatología de la viruela del mono

La viruela del mono se propaga principalmente a través de tres vías: el contacto sexual directo, el contacto con objetos contaminados, y la transmisión de madre a hijo durante el embarazo. A diferencia de la COVID-19, la transmisión de este virus no es respiratoria, lo que facilita en cierta medida su control. Los síntomas suelen comenzar con un cuadro fuerte de dolor de cabeza y molestias generales, seguido por una erupción cutánea característica.

Esta erupción evoluciona desde manchas iniciales hasta vesículas y pústulas, culminando en costras que eventualmente caen. Durante todo este proceso, que puede durar varias semanas, la persona infectada es contagiosa. Es crucial destacar que la viruela del mono no discrimina por raza o nacionalidad; cualquier persona puede contraerla. De hecho, la variante actual parece afectar más a niños y jóvenes, lo que añade una nueva dimensión a las estrategias de prevención y control.

Estrategias de prevención y control en Europa

En respuesta a esta amenaza, los países europeos están implementando medidas proactivas de prevención y control. La vacunación de grupos de riesgo se perfila como una estrategia clave. Entre estos grupos se incluyen viajeros a África Central, personas que han tenido contacto con casos sospechosos, individuos con múltiples parejas sexuales, trabajadores del sexo y personal sanitario, independientemente de su exposición directa a pacientes infectados.

Además de la vacunación, se están reforzando los sistemas de vigilancia epidemiológica y se está poniendo énfasis en la información y educación de la población. Se insta a las personas que presenten síntomas o hayan tenido contactos de riesgo a que se pongan en contacto con los servicios médicos de inmediato. La transparencia en la comunicación y la rapidez en la detección de casos son fundamentales para contener la propagación del virus. Asimismo, se está trabajando en la coordinación internacional para asegurar el acceso equitativo a vacunas y antivirales, especialmente en las regiones más afectadas de África Central.