El dulce de leche es un manjar que encanta a muchos, es el acompañante ideal para una variedad de dulces y postres, especialmente cuando se trata de galletas. Este delicioso ingrediente, que se obtiene mediante la cocción lenta de leche y azúcar, transforma cualquier galleta simple en una experiencia gustativa inigualable.
Este manjar tiene la habilidad de complementar a la perfección la textura crujiente de las galletas y su sabor puede variar desde suave y cremoso hasta intensamente caramelizado. Aunque es un proceso sencillo, muchos no sabes hacerlo adecuadamente, es por ello que aquí te enseñaremos cuidadosamente cómo puedes prepararlo y deleitar tu paladar y el de tus seres queridos.
2El proceso para hacer dulce de leche es sencillo pero lleva tiempo, por lo que la paciencia es esencial

El proceso para hacer dulce de leche inicia calentando la leche en una cacerola a fuego medio. Se agrega el azúcar y se remueve constantemente para disolverla por completo. A medida que la mezcla comienza a calentar, se añade el bicarbonato de sodio, que facilita el desarrollo de una textura sedosa.
La clave para que todo salga perfecto es la paciencia; se debe cocinar a fuego lento, removiendo continuamente para evitar que se queme, hasta que la mezcla se espese y adquiera un color dorado profundo. Este proceso puede durar entre una hora y media a dos horas, dependiendo de la intensidad del fuego y la cantidad de leche utilizada.
Una vez que el dulce de leche está listo, se debe dejar enfriar antes de utilizarlo como complemento para tus galletas. La textura final debe ser suave y cremosa, perfecta para untar o para servir como relleno.