El flan de chocolate blanco es un postre delicioso que mezcla la suavidad y cremosidad del flan con el dulce sabor del chocolate blanco. Este rico flan de chocolate blanco es perfecto para terminar una comida con un toque de sofisticación y dulzura.
La preparación de este postre es relativamente fácil y el resultado es un flan que se deshace en la boca, con una textura rica y un sabor que encandila a todos los que lo prueban.
2Paso a paso para hacer un delicioso flan de chocolate blanco y sorprender a tus invitados
El primer paso para preparar el flan de chocolate blanco es hacer el caramelo. En una sartén, se calienta azúcar con un poco de agua hasta que se derrite y se pueda ver un caramelo dorado. Este caramelo se vierte en el fondo de los moldes para flan y se deja enfriar y endurecer. Mientras el caramelo se fija, se puede empezar a realizar la mezcla del flan. Se derrite el chocolate blanco al baño maría o en el microondas, y se reserva para más adelante.
En un recipiente grande, se mezcla la leche y la crema de leche, y se calienta a fuego medio. En otro bol, se baten los huevos con el azúcar y la esencia de vainilla. Una vez que la leche y la crema están calientes, se mezcla lentamente con los huevos batidos, con mucho cuidado para que no se cuajen. Después, se incorpora el chocolate blanco derretido y se mezcla bien hasta obtener una mezcla uniforme.
La mezcla se vierte cuidadosamente en los moldes sobre el caramelo enfriado. Los moldes se colocan en una bandeja para horno con agua caliente, creando un baño María que ayuda a cocinar el flan de manera uniforme y suave. Se hornea a 160 grados Celsius durante unos 45 minutos, o hasta que el flan esté cuajado pero aún tembloroso en el centro. Una vez cocido, el flan de chocolate blanco se deja enfriar a temperatura ambiente antes de refrigerarlo durante al menos 4 horas, preferiblemente durante toda la noche.
