Las intensas lluvias que azotaron Cataluña, especialmente durante el martes y miércoles, han dado un respiro a la región. La Generalitat, a través de Protección Civil, ha desactivado la alerta del plan Inuncat al considerar que el episodio de precipitaciones, que mantuvo en vilo a la población, ha finalizado sin dejar incidencias significativas.
El riesgo de inundaciones, que se cernía sobre varias comarcas catalanas, ha disminuido considerablemente gracias a la disminución de la inestabilidad atmosférica. Sin embargo, las autoridades y servicios de emergencia se mantienen alerta ante la posibilidad de nuevas precipitaciones, aunque de menor intensidad, en las próximas horas.
El Servei Meteorològic de Catalunya Pronostica Lluvias Dispersas
A pesar de la mejora generalizada, el Servei Meteorològic de Catalunya (SMC) advierte sobre la posibilidad de lluvias dispersas durante la tarde del jueves. Estas precipitaciones, aunque no se espera que sean tan intensas como las de días anteriores, podrían alcanzar el umbral de 20 litros por metro cúbico en tan solo 30 minutos.
Las zonas más propensas a registrar estas precipitaciones son el Pirineo y Prepirineo Oriental, así como la Cataluña Central. El SMC también ha advertido sobre la posibilidad de que se produzcan tormentas localizadas acompañadas de granizo, por lo que se recomienda a la población estar atenta a las actualizaciones meteorológicas.
Importancia de la Prevención y la Colaboración Ciudadana
La rápida actuación de los servicios de emergencia y la colaboración ciudadana han sido claves para evitar desgracias mayores durante este episodio de lluvias torrenciales. Es fundamental recordar la importancia de seguir las recomendaciones de las autoridades ante este tipo de situaciones, especialmente en lo que respecta a la limpieza de desagües y la prudencia al volante.
Mantenerse informado a través de los canales oficiales, como el SMC y Protección Civil, permite a la ciudadanía tomar decisiones responsables y contribuir a la seguridad colectiva. La prevención sigue siendo la mejor herramienta para minimizar los riesgos asociados a los fenómenos meteorológicos adversos.