Ahorra más en el supermercado con estos 3 consejos contra el neuromarketing

Ahorrar en el supermercado se ha convertido en una prioridad para muchos hogares en España, especialmente en un contexto económico incierto. Sin embargo, las estrategias de neuromarketing implementadas por las cadenas de supermercados pueden dificultar este objetivo. Estas técnicas, diseñadas para influir en nuestras decisiones de compra a nivel subconsciente, hacen que llenemos el carrito con productos innecesarios o más costosos de lo planeado. Afortunadamente, existen formas de contrarrestar estos efectos y optimizar nuestras compras sin caer en las trampas del neuromarketing.

El neuromarketing utiliza principios de la neurociencia para entender y dirigir el comportamiento del consumidor. Desde la disposición de los productos en las estanterías hasta el uso de colores y olores específicos, todo está calculado para que los clientes compren más de lo que realmente necesitan. Sin embargo, con un poco de preparación y conciencia, es posible resistir estas tácticas y ahorrar significativamente en cada visita al supermercado.

2
APROVECHA LAS OFERTAS CON INTELIGENCIA

Las ofertas y promociones son un arma de doble filo. Si bien pueden representar una oportunidad para ahorrar, también pueden ser una trampa si no se utilizan con cautela. Los supermercados frecuentemente utilizan técnicas como los «descuentos por cantidad« o las promociones «2×1» para aumentar las ventas. Sin embargo, estas ofertas solo son beneficiosas si realmente necesitas esos productos y si el precio final por unidad es menor que el habitual. De lo contrario, estarás gastando más dinero y acumulando productos que no utilizarás.

Es recomendable comparar los precios unitarios de los productos antes de aprovechar una oferta. En muchos casos, el precio por kilo o litro puede ser más elevado en los productos en oferta que en aquellos que no lo están. También es útil analizar la frecuencia con la que realmente utilizas ciertos productos antes de decidirte a comprarlos en grandes cantidades. De esta forma, evitarás el desperdicio y te asegurarás de que las promociones realmente supongan un ahorro y no un gasto innecesario.