Maduro extiende el terror en Venezuela ante la pasividad de la Comunidad Internacional

La oposición de Venezuela en España muestra la realidad de la dictadura de Nicolás Maduro, flamante perdedor de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, pero que se niega a aceptar el resultado con una represión sin precedentes. La cifra de detenidos y secuestrados por el régimen, defendido por José Luis Rodríguez Zapatero, exsecretario general del PSOE y expresidente del Gobierno de España, no para de aumentar.

Hasta el lunes, una semana después de los comicios, el número de detenidos y secuestrados supera los 2.000, mientras que se han registrado más de 25 muertos en una semana oscura para el país del Caribe. Lejos de admitir la derrota y mostrar las actas electorales, con los QR y firmas originales, el líder chavista ha anunciado la construcción de dos cárceles de máxima seguridad, mientras extiende su régimen de terror en Venezuela.

EDMUNDO GONZÁLEZ, EL OBJETIVO DE MADURO

El Fiscal General del país, Tarek William Saab, ha iniciado una «investigación penal» contra los líderes de la oposición, Edmundo González y María Corina Machado, por haber afirmado en un manifiesto que son los ganadores de las elecciones. El Ministerio Público de Venezuela, lejos de hacer cumplir la ley e iniciar una investigación contra el Consejo Nacional Electoral por dar como ganador a Nicolás Maduro sin haber realizado el escrutinio íntegro ni haber publicado las actas en el plazo de 48 tras la celebración de los comicios, tampoco ha emprendido acciones contra Maduro por haberse autorrogado la presidencia saltándose todo el ordenamiento jurídico.

María Corina Machado y Edmundo González, un tándem que apunta muy alto para el 28-J en Venezuela
María Corina Machado y Edmundo González, un tándem que apunta muy alto para el 28-J en Venezuela

Asimismo, Saab tampoco ha exigido la publicación de las actas electorales, como sí ha hecho la oposición, unos documentos fácilmente contrastables porque hay decenas de copias de cada una de las más de 30.000 máquinas utilizadas en la votación. Como no podía ser de otra manera, el Fiscal General del Estado bolivariano solo sirve a las órdenes de su amo. En su comunicado, la Fiscalía asegura que Edmundo González y María Corina Machado se han situado al «margen» de la Constitución y la Ley al atribuirse «falsamente» la victoria en los comicios. De hecho, a Edmundo González le tilda de «excandidato».

LA MITAD DE LOS DETENIDOS POR EL RÉGIMEN DE MADURO, MILITARES

El mensaje de la oposición va dirigido especialmente a los militares, un acto de «incitación a funcionarios policiales» a la desobediencia de las leyes, cuando el primero en pisotearlas es el propio fiscal general, junto al CNE y Maduro. Así, apunta a «usurpación de funciones, difusión de información falsa para causa zozobra, instigación a la desobediencia de las leyes, instigación a la insurrección, asociación para delinquir y conspiración».

La ristra de delitos podría ser aplicable al mismo presidente de Venezuela, especialmente por la usurpación de poderes tras negarse a publicar las actas. Estas penas comportan un mínimo de quince años de prisión, según las leyes venezolanas.

Tan solo un grupo reducido de países se ha negado a reconocer a Nicolás Maduro y dar la victoria a Edmundo González, dadas las actas entregadas públicamente por la oposición, un registro al que tienen acceso todos los partidos y ni uno solo ha desmentido a los de Edmundo González, presidente legítimo de Venezuela, y María Corina Machado. Entre ellos se encuentra EE UU, Argentina, Perú y Chile, mientras Brasil, México y Colombia muestran un perfil muy bajo y acorde con el régimen de Maduro a pesar de la grave situación que borraría la democracia en Venezuela.

LA OPOSICIÓN ALZA LA VOZ: LOS COMUNICADOS YA NO SON VÁLIDOS

Las principales voces de la oposición se han dado cita en la madrileña sede del despacho Cremades & Calvo-Sotelo, que ha cedido la sala para la presentación, para tratar la verificación del proceso del escrutinio electoral de Venezuela y denunciar la violación sistemática de los derechos humanos, con el silencio cómplice de la izquierda española, donde no se ha denunciado ni por parte del PSOE ni por parte del Gobierno de Pedro Sánchez, la alarmante situación en el país caribeño.

En la rueda de prensa, Antonio Ledezma, exalcalde metropolitano de Caracas, ha puesto de manifiesto que el régimen de Maduro no es otra cosa que la «versión tropical de Adolf Hitler». Tras explicar cómo funcionan y qué información aportan las cruciales actas, el opositor antichavista ha mandado un mensaje a Maduro: «Hemos hecho nuestro trabajo como pueblo venezolano, que es ganar las elecciones y demostrar la validez del proceso gracias a las actas publicadas».

Zapatero y Sánchez en un mitin de una campaña electoral
Zapatero y Sánchez en un mitin de una campaña electoral

Y al mismo tiempo uno quizá más contundente a la comunidad internacional, prácticamente ausente una semana y media después de los comicios. «Ahora le toca a la comunidad internacional reconocer la victoria y al presidente elegido por mayoría. Exigimos una fase de transición pacífica». «Maduro tiene las balas, pero nosotros tenemos los votos», ha señalado el exedil caraqueño.

EL CHAVISMO DE MADURO Y EL INCUMPLIENTO DE LAS LEYES

Las actas de la oposición, las únicas publicadas y fácilmente contrastables, apuntan que Edmundo González ganó las elecciones con el 67% de los votos. De hecho, este alto porcentaje se ha podido conseguir debido al ‘arma secreta’ de la oposición, que no era otra que obtener una copia de cada una de las actas, un comando con Venezuela para vigilar la jornada electoral y poder certificar así el fraude de Maduro y del chavismo, en connivencia con el CNE y el Tribunal Supremo de Justicia.

CNE no ha hecho las auditorias de elección: proclamó a Maduro como ganador. Y Maduro pretende acurdir al Tribunal Supremo de Justicia para que dirima el resultado, pero el tribunal está controlado por Maduro, así como todas las instituciones.

Tal es el régimen de terror que la policía y los militares venezolanos no tienen reparos en detener a dirigentes opositores en mitad de un streaming, donde se han podido identificar a quienes han cometido estos arrestos, como le ha pasado a María Oropeza, abogada y líder regional de Vente Venezuela, mientras la UE y el PSOE de Pedro Sánchez, Zapatero y José Manuel Albares callan, con el aplauso de Sumar, una buena parte de Podemos, Bildu, el BNG y la CUP.

MÁS DE 2.000 DETENIDOS O SECUESTRADOS

Son ya 2.000 presos políticos en una represión feroz, a la que el régimen de Maduro pide «el máximo castigo», con detenciones masivas y «cárceles para reeducar». Los testimonios de las cárceles, como ha podido comprobar el Víctor González, exdiputado de Vox, retenido y secuestrado durante seis horas en una comisaria del aeropuerto, muestran solo una parte del horror que se expande en el país. La cárcel más temida y centro de la temida Sebin -la gestapo venezolana-, El Helicoide, está ya a máximo rendimiento. Las amenazas y las desapariciones están a la orden del día, mientras el régimen de Maduro busca también culpables entre los militares.

Nicolás Maduro se salta la ley y su Constitución al no publicar las actas. La excusa es el ataque informático, pero la oposición ya ha dado cuenta de ellas
Nicolás Maduro se salta la ley y su Constitución al no publicar las actas. La excusa es el ataque informático, pero la oposición ya ha dado cuenta de ellas

La oposición venezolana tan solo pide una transición pacífica, pero tiene muy claro que ni va a pactar unas nuevas elecciones ni tampoco va a sostener al régimen durante otros seis años más. Las premisas de Ledezma ante la sinrazón de Maduro se centran en el amor frente al odio; el progreso frente a la miseria; y la paz sobre la violencia. Es el único mensaje, más cuando la única violencia practicada hasta ahora proviene de un único banco: el de Maduro y sus motorizados.

Tal es el miedo de Maduro que ha cerrado medios de comunicación y bloqueado otros que daban voz a la oposición. Por eso, Edmundo González y María Corina Machado solo pueden moverse por Internet, donde el régimen no es capaz de llegar. «Esta es la versión tropical de Hitler, la versión del s. XXI del dictador de Uganda», ha afirmado Ledezma.

El régimen de Maduro se ha preocupado más de su propio bienestar que del pueblo. Ahora promete construir cárceles de máxima seguridad cuando no ha levantado ni un hospital. De esta forma, lejos de gobernar para todos, se ha dedicado a aplastar a una oposición formada por personas civiles, a las que han quitado todo, incluido el miedo. De ahí su valentía para ponerse frente a frente con un régimen dispuesto a disparar si las cosas no salen como ellos esperan.

«Maduro quiere convertir a Venezuela en una cárcel, que las casas sean cárceles, y por eso quiere instaurar el miedo», ha asegurado Ledezma. Pero los venezolanos lo han perdido todo y solo luchan por su libertad; mientras Maduro prometió un «baño de sangre» tras los comicios del 28-J.