Un paraíso que esconde un pasado marcado por la tragedia, es el destino ideal por los españoles que están planificando sus vacaciones para agosto. Este paraíso se llama Playa de los Muertos y se encuentra dentro del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar en Almería.
Con aguas cristalinas, arena blanca y olas ideales para el surf, este páramo es uno de los elegidos por los turistas locales y extranjeros que deciden alejarse de todo para sumirse en un auténtico paraíso natural con una historia de miedo.
Cómo es el paraíso español marcado por la tragedia
Tal como lo indica, la Playa de los Muertos lleva ese nombre por una serie de hechos desafortunados que marcaron su historia. Según revelan los lugareños, este lugar se desarrollaron una variedad de naufragios que le dieron este título indeseable para muchos, pero que no opaca la natural belleza con la que los bañistas se encuentran en ella.
Este lugar se encuentra dentro del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar que cuenta con una extensión de 38.000 hectáreas terrestres y 12.000 hectáreas marinas, siendo el mayor espacio marítimo- terrestre protegido de la Península Ibérica. Este parque tiene un atractivo único y es que incluye a más de 30 calas y playas que se extienden a lo largo de más de 70 kilómetros de línea de costa.
Los secretos del paraíso único en Almería
Dentro de la variedad de playas del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, la Playa de los Muertos es la que se destaca por su enorme acantilado y su paisaje rocoso, que le da un encanto particular y contrasta con el azul turquesa e intenso del mar. No en vano, este sitio aparece en la lista de los mejores arenales del país y tiene más de un kilómetro de longitud. Su acceso no es simple y hay que caminar por senderos de piedra y ruda. También, los lugareños recomiendan tener cuidado con las olas porque pueden resultar peligrosas para los más atrevidos.
Como se menciona anteriormente, este paraíso lleva tan tétrico nombre por las tragedias que se sucedieron en sus orillas. Quienes habitaron estas tierras en otros tiempos, aseguran que a esta zona se acercaban los cadáveres de náufragos arrastrados por las fuertes corrientes, aunque nada de ello tiene vigencia en la actualidad. Para llegar a este sitio, se puede coger la N-341 y viajar en coche durante unos 50 minutos. Su distancia de la ciudad de Almería es de apenas 78 kilómetros.
