La contundente advertencia de la Fed de Chicago ante un agravamiento de la crisis

La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) está preparada para responder de manera apropiada ante un potencial deterioro de las condiciones económicas y buscar soluciones si fuera necesario. Así lo ha indicado Austan Goolsbee, presidente del Banco de la Fed de Chicago, quien ha señalado que Estados Unidos no se encamina hacia una recesión, a pesar de los malos datos de empleo de la semana pasada.

Goolsbee ha explicado que las cifras de empleo fueron más débiles de lo esperado, pero aún no parecen indicar una recesión. En términos reales, al descontar la inflación, los tipos de interés siguen siendo restrictivos, lo que sugiere que no hay sobrecalentamiento de la actividad económica.

Equilibrar el doble mandato de la Fed

El representante de la Fed ha recordado la necesidad de equilibrar el doble mandato de la institución, ya que si bien durante mucho tiempo pudo concentrarse en la inflación, ahora se empieza a detectar cierta debilidad del mercado laboral, a lo que deben prestar atención.

«Miramos hacia el futuro y si las condiciones colectivas comienzan a empeorar, vamos a solucionarlo», ha asegurado Goolsbee. «Vamos a responder como corresponde», ha reiterado, demostrando el compromiso de la Reserva Federal para actuar ante un posible deterioro económico.

Datos económicos recientes en Estados Unidos

El pasado viernes, el Departamento de Trabajo de EE.UU. informó que la primera economía mundial generó 114.000 nuevos puestos de trabajo no agrícolas durante el mes de julio, una cifra muy inferior a los 179.000 creados en junio. Además, la tasa de paro subió dos décimas, hasta el 4,3%.

Asimismo, se revisaron a la baja las lecturas de mayo y junio, descontando así 29.000 puestos de trabajo respecto a lo informado anteriormente. Unos días antes, la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio informó que el índice de precios de gasto de consumo personal, la estadística escogida por la Fed para monitorizar la inflación, se moderó una décima en junio, hasta el 2,5% interanual, mientras que la variable subyacente cerró el sexto mes de 2024 con un incremento del 2,6%, sin cambios desde el dato del mes previo.

En resumen, los datos económicos recientes en Estados Unidos, si bien muestran signos de debilidad, no parecen indicar una recesión inminente, lo que lleva a la Reserva Federal a mantener un compromiso firme de responder de manera adecuada ante un posible deterioro de las condiciones económicas.