La princesa Leonor y su hermana, la infanta Sofía, se convirtieron en el centro de atención en los Juegos Olímpicos de París. Todo comenzó con la asistencia de Felipe y Letizia a la inauguración de los Juegos cerca del Sena, empapados por la lluvia pero sonrientes mientras se tomaban selfies.
1La princesa Leonor y la infanta Sofía como amuletos de la suerte de la delegación española
Aunque todo inició con los reyes, pronto quedó claro que el relevo en estos juegos lo tomarían sus hijas, quienes fueron vistas en casi todas las competiciones, convirtiéndose en un amuleto de la suerte para la delegación española.
Leonor y Sofía no solo asistieron al debut en dobles de Nadal y Alcaraz en Roland Garros, sino que también estuvieron en la victoria del equipo masculino de waterpolo sobre Australia. Las jóvenes royals parecían traer suerte a todos los equipos españoles, incluyendo a Carolina Marín en bádminton y al equipo femenino de hockey hierba, que ganó a Gran Bretaña en un partido disputado en el estadio Yves-du-Manoir.