En verano uno de los planes más divertidos puede ser pasar el día de campo y playa. Una idea perfecta para no pasar calor en la ciudad y de cambiar de aires en los dos meses de verano. Solo se necesita tiempo libre, una nevera portátil, comida, bebida y mesas y sillas plegables para pasar el día. Una buena opción es llevar la comida preparada por nosotros mismos o por algún comercio cercano. Hay que tener en cuenta que Mercadona se ha convertido en un especialista en su preparación con los platos listos para comer.
Entre todas estas cosas lo que es totalmente indispensable es llevar una nevera portátil o una bolsa térmica para mantener tus alimentos frescos, así como suficiente agua y otras bebidas para mantenerse hidratado. Puede que al llegar al sitio elegido no haya ningún chiringuito ni ningún lugar para comprar bebida y lo mejor es llevarla fría.
En Mercadona se pueden encontrar diversos productos preparados que pueden ser perfectos para pasar un día en el campo o en la playa. En estos conocidos supermercados podemos encontrar bocadillos preparados, ensaladillas de diversos tipos, ensaladas preparadas u otros que no necesitan un microondas para calentarlo. Incluso se pueden comprar productos como un brick de gazpacho o salmorejo que se puede llevar con las bebidas en una de las nevera. Gracias a estos productos ahorraremos tiempo y disfrutaremos de un día al aire libre sin agobios ni problemas.
2Ensaladilla rusa grande Listo para Comer
Otra buena opción es este plato de ensaladilla rusa en formato grande que se ha convertido en uno de los favoritos de los clientes de Mercadona en verano. Se presenta en una bandeja de 1,75 kg y a un precio de 12,00 euros. Esta ensaladilla en formato XL tiene una buena textura, con consistencia firme y fácil de consumir en la bandeja. Una ensaladilla compuesta de patatas acompañada de mayonesa que se ha elaborado a partir de huevo, aceite de soja, vinagre, sal, azúcar. Los demás ingredientes de la ensaladilla son atún, huevo cocido y un toque de zumo de limón.
Esta ensaladilla es un producto listo para consumir y que debe conservarse en el frigorífico para que sus ingredientes se mantengan en todo momento. Un producto que según el fabricante debe conservarse entre 1°C y 4°C para mayor durabilidad. Una vez esté abierto, es recomendable por parte del fabricante que consumas este producto en al menos unas 48 horas posteriores. En la parte posterior del envase además encuentras su propiedades nutricionales, para que puedas llevar un control de lo que consumes en cada porción.
