El consejero de CyL califica de «éxito» la gestión del oso pardo en Castilla y León, Cantabria y Asturias

La conservación y gestión del oso pardo en Castilla y León ha sido un éxito rotundo gracias a la estrecha colaboración entre las comunidades autónomas de Castilla y León, Asturias y Cantabria. El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha destacado la efectividad de las medidas implementadas para recuperar y proteger a esta especie emblemática.

Suárez-Quiñones ha recordado que antes de la colaboración entre las tres comunidades, el oso pardo tenía poblaciones aisladas y estaba en peligro de extinción en la región. Sin embargo, gracias al trabajo conjunto, se ha logrado recuperar la población y crear un corredor de población a lo largo de la Cordillera Cantábrica. Este esfuerzo ha dado como resultado numerosos nacimientos y ha permitido observar al oso pardo incluso en el norte de Burgos.

La Clave: Colaboración entre Comunidades Autónomas

La clave del éxito en la gestión del oso pardo ha sido la colaboración estrecha entre las comunidades autónomas de Castilla y León, Asturias y Cantabria. Estas tres regiones han trabajado de manera coordinada para implementar medidas efectivas de conservación y protección de la especie.

Una de las estrategias clave ha sido la creación de corredores de población a lo largo de la Cordillera Cantábrica. Esto ha permitido que los osos puedan moverse libremente entre los diferentes hábitats y evitar el aislamiento de las poblaciones. Como resultado, se ha observado un aumento significativo en el número de nacimientos y la recuperación de la especie.

Además, las comunidades autónomas han invertido en programas de formación e información para las poblaciones locales. Esto ha sido fundamental para mejorar la convivencia entre los osos y los habitantes de la región, y para prevenir posibles conflictos ante avistamientos de la especie.

Éxito en Cifras: Población de Oso Pardo en la Cordillera Cantábrica

Según la información proporcionada por la Junta de Castilla y León, la población actual de oso pardo en la Cordillera Cantábrica se estima en 370 individuos, de los cuales 210 son machos y 160 son hembras. Estos datos demuestran el éxito rotundo de las medidas de conservación y gestión implementadas por las comunidades autónomas.

El aumento de la población del oso pardo en la Cordillera Cantábrica es un logro significativo que refleja el compromiso y la efectividad de las acciones llevadas a cabo. Gracias a la colaboración entre las regiones, se ha logrado recuperar una especie emblemática que estaba en peligro de extinción, convirtiéndola en un símbolo de la biodiversidad y la conservación en esta región.